Los periodistas de Túnez estaban en huelga este martes, tras la detención durante tres días de uno de ellos, que había acusado al fiscal de falsificar pruebas para inculpar a un cámara de ser cómplice del lanzamiento de un huevo contra un ministro.
Las organizaciones profesionales consideran que el gobierno, la justicia y la policía aplican sistemáticamente el código penal del régimen del derrocado Zine El Abidine Ben Ali, en lugar de los decretos menos represivos promulgados tras su huida a Arabia Saudita a principios de 2011, provocada por una fuerte movilización popular.
Este martes, los diarios hablaban de la huelga en su portada: "Los periodistas tunecinos están hartos, pero no bajan los brazos", según Le Temps, mientras que Le Quotidien se refería a "la batalla de la libertad de expresión".
"Si se cercenan las libertades y se restablece insidiosamente el orden del terror, se desencadenará una rebelión", estimó por su parte La Presse. El periodista Zied el Heni permaneció detenido desde el viernes hasta el lunes por acusar al fiscal de falsificar pruebas para inculpar a un cámara que en agosto grabó el lanzamiento de un huevo contra un ministro, según su abogado.
El periodista fue demandado por haber acusado al fiscal de la república, Tarej Shkiua, de haber falsificado pruebas contra el cámara Murad Meherzi, acusado de complicidad en el lanzamiento de un huevo contra el ministro de Cultura, Mehdi Mabruk.
Meherzi, que pasó tres semanas en detención provisional antes de ser liberado a principios de este mes, asegura que sólo grabó la escena, una versión de los hechos confirmada por el autor del lanzamiento, el cineasta Nasredin Shili. El abogado del ministro, Mabruk Kurshid, afirmó ante la justicia la semana pasada que Meherzi sólo hacía su trabajo cuando se produjeron los hechos.
Antes de la detención del periodista, la ONG Human Rights Watch criticó las demandas contra Heni y otras personas y acusó a las autoridades de atacar la libertad de expresión.
Las organizaciones profesionales consideran que el gobierno, la justicia y la policía aplican sistemáticamente el código penal del régimen del derrocado Zine El Abidine Ben Ali, en lugar de los decretos menos represivos promulgados tras su huida a Arabia Saudita a principios de 2011, provocada por una fuerte movilización popular.
Este martes, los diarios hablaban de la huelga en su portada: "Los periodistas tunecinos están hartos, pero no bajan los brazos", según Le Temps, mientras que Le Quotidien se refería a "la batalla de la libertad de expresión".
"Si se cercenan las libertades y se restablece insidiosamente el orden del terror, se desencadenará una rebelión", estimó por su parte La Presse. El periodista Zied el Heni permaneció detenido desde el viernes hasta el lunes por acusar al fiscal de falsificar pruebas para inculpar a un cámara que en agosto grabó el lanzamiento de un huevo contra un ministro, según su abogado.
El periodista fue demandado por haber acusado al fiscal de la república, Tarej Shkiua, de haber falsificado pruebas contra el cámara Murad Meherzi, acusado de complicidad en el lanzamiento de un huevo contra el ministro de Cultura, Mehdi Mabruk.
Meherzi, que pasó tres semanas en detención provisional antes de ser liberado a principios de este mes, asegura que sólo grabó la escena, una versión de los hechos confirmada por el autor del lanzamiento, el cineasta Nasredin Shili. El abogado del ministro, Mabruk Kurshid, afirmó ante la justicia la semana pasada que Meherzi sólo hacía su trabajo cuando se produjeron los hechos.
Antes de la detención del periodista, la ONG Human Rights Watch criticó las demandas contra Heni y otras personas y acusó a las autoridades de atacar la libertad de expresión.
AGENCIA