La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha dejado atrás el luto estricto que llevaba desde la muerte de su esposo, el expresidente Néstor Kirchner, ocurrida hace tres años.
En su primera actividad oficial en la Casa Rosada luego de estar convaleciente por un mes debido a la neurocirugía a la que fue sometida, la mandataria vestía un jersey negro y una falda clara con encaje negro, destaca la prensa local.
Fernández lució lo que ha sido considerado un look a ‘medio luto’ o ‘luto abreviado’; y en su vuelta a la escena pública tomó juramento a los nuevos miembros de su Gobierno, luego salió a los corredores de la sede presidencial para saludar a los militantes, que la recibieron con banderas, pancartas, cánticos, vivas y ovaciones.
La gobernante argentina reapareció este lunes a través de un video publicado en su blog oficial, en el que agradeció el apoyo que recibió luego de la cirugía craneal y confesó que vivió un momento difícil. Ese mismo día, fueron anunciados cambios clave en el Gabinete.
Los médicos le han recomendado bajar el nivel de estrés y de actividad tras su operación, por lo que tendrá que desarrollar buena parte de su agenda en la residencia presidencial de Olivos, en las afueras de Buenos Aires, y no podrá volar ni recorrer largas distancias en los próximos meses.
En su primera actividad oficial en la Casa Rosada luego de estar convaleciente por un mes debido a la neurocirugía a la que fue sometida, la mandataria vestía un jersey negro y una falda clara con encaje negro, destaca la prensa local.
Fernández lució lo que ha sido considerado un look a ‘medio luto’ o ‘luto abreviado’; y en su vuelta a la escena pública tomó juramento a los nuevos miembros de su Gobierno, luego salió a los corredores de la sede presidencial para saludar a los militantes, que la recibieron con banderas, pancartas, cánticos, vivas y ovaciones.
La gobernante argentina reapareció este lunes a través de un video publicado en su blog oficial, en el que agradeció el apoyo que recibió luego de la cirugía craneal y confesó que vivió un momento difícil. Ese mismo día, fueron anunciados cambios clave en el Gabinete.
Los médicos le han recomendado bajar el nivel de estrés y de actividad tras su operación, por lo que tendrá que desarrollar buena parte de su agenda en la residencia presidencial de Olivos, en las afueras de Buenos Aires, y no podrá volar ni recorrer largas distancias en los próximos meses.