David Nalbandian le puso punto final a su carrera como tenista profesional con un encuentro despedida con derrota ante Rafael Nadal por 6-3 y 6-4 en una emotiva jornada en el predio Rural de la ciudad de Buenos Aires.De esta manera, el español se tomó "revancha" de la derrota que había sufrido ante el homenajeado tenista local el jueves en el estado Orfeo de Córdoba, cuando "el Rey David" se impuso por 6-4 y 7-6 (6).
Para completar la fiesta de homenaje a Nalbandian, luego del encuentro de individuales se sumaron el serbio Novak Djokovic y el también argentino Juan Mónaco para jugar un partido de dobles.
Las risas y la alegría se mezclaron con la nostalgia y la emoción en el último partido de Nalbandian ante su público, y con el número uno y el dos del mundo en la pista como testigos de excepción.
Entre las humoradas de la tarde, el serbio Djokovic se vistió de doctor y atendió una supuesta lesión de Nalbandian.
Las casi 10.000 personas que acudieron al evento aplaudieron al ídolo local y reconocieron con una ovación a Rafael Nadal, que volvió a Buenos Aires tras ocho años de su última presentación en el torneo ATP local.
También hubo tiempo para una ovación a Djokovic, que visita Argentina por primera vez y luego de pasar por Chile.
Nalbandian, de 31 años conquistó once títulos, entre ellos dos Masters Series y un Torneo de Maestros, y terminó tercero en el ránking de la ATP en el 2006.
Con 13 años de carrera, Nalbandian con lágrimas en los ojos, agradeció a todos por el cariño y el apoyo.
Nadal y Djokovic, luego de su exhibición de ayer frente al Glaciar Perito Moreno de la ciudad patagónica de El Calafate, se medirán mañana en el predio Rural de Buenos Aires, como lo hicieron en la reciente final del último torneo de Maestros de Londres.
El mallorquín comenzó su gira sudamericana la semana pasada en Perú junto a su compatriota David Ferrer y el local Luis Horna.
Luego el actual número uno del mundo se trasladó a Santiago de Chile, donde el miércoles participó con Djokovic y David Nalbandian en la despedida de Nicolás Massú.
EFE
