Más de 13.000 personas han firmado en menos de 24 horas una petición a la Casa Blanca para que deporte al cantante canadiense Justin Bieber, que está en libertad bajo fianza desde el jueves por conducir a velocidad excesiva y bajo el efecto del alcohol y otras sustancias en Miami.
"Nosotros, el pueblo de Estados Unidos, sentimos que no estamos bien representados en el mundo de la cultura pop. Nos gustaría ver al peligroso, insensato, destructivo, y consumidor de drogas Justin Bieber deportado y con su permiso de residencia revocado", reza la nota, registrada en la sección de peticiones de los ciudadanos de la página web de la Casa Blanca, "We The People".
Y añade: "(Bieber) No sólo es una amenaza para la seguridad de nuestro pueblo sino que también es una mala influencia para nuestros jóvenes. Nosotros, el pueblo, queremos que Justin Bieber salga de nuestra sociedad".
La sección "We The People" (Nosotros, el pueblo), cuyo nombre hace referencia al inicio del preámbulo de la Constitución de EE.UU., funciona desde 2011 como herramienta del Gobierno para mostrarse abierto a la opinión de los ciudadanos.
Un equipo de la Casa Blanca estudia las peticiones que reúnen el número necesario de firmas (esta necesita 86.000 más para el 22 de febrero) y cumplen con las normas, para después decidir qué organismo da una respuesta oficial a la reclamación.
El arresto el jueves de Bieber ha generado un gran debate en EE.UU. sobre si, en las mismas condiciones, otro inmigrante como él, legal o no, no habría sido deportado ya a su país de origen.
La detención en Miami ha sido la gota que colma el vaso, pero el asunto que más amenaza el estatus migratorio del cantante no es la conducción en estado de ebriedad sino el caso de vandalismo por el que está siendo investigado.
El comportamiento reprobable del ídolo juvenil fue también noticia hace una semana, cuando la policía registró su casa de Los Ángeles después de que un vecino le denunciara por lanzar huevos contra su propiedad.
Durante esta operación, ocho personas, incluido Bieber, fueron retenidas dentro del domicilio y una de ellas, el joven rapero Lil Za, fue arrestado por posesión de drogas, en concreto cocaína, que los agentes encontraron "a la vista", si bien no se estableció relación entre el narcótico y el cantante canadiense.
Mientras esta investigación sigue en marcha, Bieber tendrá que declarar el lunes en Miami ante el juez para dilucidar los niveles reales de alcohol que tenía el cantante cuando fue detenido por conducir a velocidad excesiva.
Un extranjero con residencia permanente (Green Card) o con visa temporal, como es el caso de Bieber, puede ser deportado en EE.UU. si se le declara culpable de un delito con agravante, como un robo, aunque los relacionados con la posesión de drogas pueden suponer también la expulsión.
Los expertos en inmigración que han comentado el caso en los periódicos y televisiones de EE.UU. coinciden en que Bieber sólo podría ser deportado si es declarado culpable de alguno de los cargos, y aún en ese caso, son escépticos sobre la posibilidad de su expulsión, porque la estrella internacional está en condiciones económicas de conseguir los mejores abogados.
Bieber reside en EE.UU. con una visa O-1, la que EE.UU. concede a aquellas personas que tienen "una excelente habilidad en las ciencias, las artes, la educación, los negocios o el deporte".
El debate sobre la eventual deportación de Bieber ha dejado perplejos a muchos estadounidenses, que asumían que la joven estrella del pop había nacido en EE.UU.
De hecho, ahora que todo el mundo sabe que es canadiense, algunos medios han elaborado listas de otros "famosos que son canadienses y no lo sabías", entre los que destacan al director de las películas "Titanic" y "Avatar", James Cameron, "del que todo el mundo olvida que nació en Ontario". EFE