El atleta sudafricano Oscar Pistorius será sometido a un estricto examen psiquiátrico durante un mes, a fin de establecer si su supuesto trastorno de ansiedad influyó a la hora de matar a tiros a su novia, la modelo Reeva Steenkamp.
"La evaluación determinará si el acusado era criminalmente responsable en el momento de cometer el delito", afirmó hoy la jueza Thokozile Masipa durante el juicio al deportista que se celebra en el Tribunal Superior de Pretoria.
El examen psiquiátrico al velocista comenzará el próximo lunes y durará un mes, durante el que el deportista paralímpico acudirá cada día -de las nueve de la mañana a las cuatro de la tarde- al hospital Weskoppies de Pretoria para ser evaluado, explicó la magistrada.
La jueza reveló los detalles de su decisión tras una semana de receso en el juicio sobre la muerte de Steenkamp, ocurrida el 14 de febrero de 2013.
Masipa aceptó el pasado miércoles la petición del fiscal, Gerry Nel, de evaluar el estado mental del deportista, después de que una psiquiatra llamada a declarar por la defensa asegurara que Pistorius sufre un Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG) que le afectó al matar a su novia.
Un psiquiatra elegido por la defensa, otro por el tribunal y un tercero designado por el hospital analizarán, junto a un psicólogo clínico, la salud mental del corredor.
Según declaró ante tribunal la psiquiatra Merryl Vorster, el atleta padece TAG desde pequeño por la discapacidad física con la que vive.
Los frecuentes ataques y robos violentos en Sudáfrica, el divorcio de sus padres durante su adolescencia y la muerte de su madre habrían acentuado el problema de Pistorius, a quien se le amputaron las dos piernas cuando tenía once meses debido a un problema genético.
A la espera de que el equipo médico concluya la evaluación, Masipa aplazó hoy el juicio hasta el próximo 30 de junio, cuando el proceso se reanudará con los resultados del examen a disposición del tribunal.
La defensa de Pistorius se había opuesto al examen psiquiátrico, al considerar que el TAG no es una enfermedad mental y no afecta a la capacidad de Pistorius de distinguir el bien y el mal.
Expertos legales contactados por Efe sostienen que el abogado de Pistorius, Barry Roux, había introducido el supuesto trastorno de ansiedad del acusado para utilizarlo en la apelación, en previsión de una sentencia dura tras las lagunas y contradicciones mostradas por el velocista durante el interrogatorio del fiscal.
Al conseguir que el deportista sea evaluado ahora, Nel -que recrimina a Pistorius haber cambiado su línea de defensa al utilizar por primera vez argumentos psiquiátricos- habría conseguido desbaratar la estrategia de los abogados del acusado.
Pistorius recibió hoy con gesto circunspecto la decisión de Masipa, y se abrazó a su hermano Carl antes de hablar largamente con Roux y abandonar el tribunal entre los flashes de las cámaras de la prensa.
El atleta, de 27 años, ha confesado haber matado a tiros a Steenkamp -que entonces tenía 29 años- a través de la puerta cerrada de su casa de Pretoria.
En su descargo, Pistorius asegura que abrió fuego presa del pánico, al confundir a su novia con un ladrón que pensaba que se había colado por la ventana del retrete.
La defensa ha invocado repetidamente la vulnerabilidad física de Pistorius y su constante temor a asesinatos y asaltos debido al clima de inseguridad que vive Sudáfrica para explicar el suceso.
Por su parte, el fiscal pide para él la cadena perpetua y le acusa de matar intencionadamente a Steenkamp, tras una supuesta discusión que aseguran haber escuchado varios vecinos llamados a declarar por la acusación.
Conocido como "Blade Runner" ("Corredor Cuchilla") por la forma de las prótesis de carbono sobre las que corre, Pistorius se convirtió en Londres de 2012 en el primer atleta con las dos piernas amputadas en competir en unos Juegos Olímpicos con deportistas no discapacitados.
Símbolo mundial de coraje y superación, las noticias sobre el asesinato de su novia le hicieron caer en desgracia.
Pistorius dejó de competir y todos sus patrocinadores cancelaron sus contratos con él.
Según confirmó recientemente una portavoz de la familia, el velocista se ha visto obligado a vender la casa en la que se produjo el crimen -valorada en unos 350.000 euros- para poder pagar los elevados costes de su defensa, en un juicio que comenzó el pasado 3 de marzo y debía durar, en principio, menos de tres semanas.
EFE