"El Bernabéu es donde uno está más orgulloso de ser culé". Con la misma naturalidad y franqueza con que siempre se expresó respecto al Real Madrid en su época de futbolista, el miércoles, tras la victoria europea frente al Ajax, Luis Enrique Martínez reiteró ante los micrófonos de Televisión Españolo que nunca ha escondido, que el Clásico es el partido que más le pone. Y en Madrid más.
Luis Enrique afronta mañana su primero como entrenador y lo hará en un ambiente similar a los nueve anteriores: el año pasado ya le recibieron con una sonora pitada cuando le nombraron por megafonía y además los medios de comunicación madrileños han centrado las tertulias en la figura del entrenador asturiano.
El adiós de Luis Enrique del Real Madrid fue traumático. Le cazaron pasando la revisión médica con el Barça jugando aún en el conjunto blanco y en los últimos meses estuvo apartado del equipo por Jorge Valdano junto con Michel y Laudrup. Lo que más dolió a la parroquia del Bernabéu, no obstante, es lo que ocurrió el 1 de noviembre de 1997.
El Barça de Van Gaal ganó al Real Madrid por dos goles a tres. Luis Enrique firmó uno de los tres tantos, su primero como azulgrana ahí, y lo celebró estirando su camiseta blaugrana ante la afición blanca.
Una pitada "gratificante"
Pero lo que no le perdonaron, ni le perdonan aún, fue la frase que soltó al término del encuentro. "No me reconozco de blanco ni en los cromos", dijo Luis Enrique, quien añadió que "ahora mismo me parece como si llevara mucho tiempo en el Barcelona".
Y sobre los insultos durante el partido, "ya estoy habituado, el silencio habría sido extraño, no habría estado a gusto; para un jugador del Barcelona es gratificante que le piten en este estadio".
Cinco años después, en una entrevista publicada el 30 de abril de 2002, Mundo Deportivo le preguntó por la cita de los cromos, que ha pasado a la historia de los Barça-Madrid: "Yo no hago ni digo nada para ganarme a nadie ni caer mejor o peor. Me marché del Madrid y vine al Barça, con el máximo respeto, sin decir nada. Pero en este país la envidia es el compañero de muchos y no se perdona el triunfo ajeno. Y alguien del Madrid empezó a difamar. Yo prefiere volver al Bernabéu siendo odiado y silbado porque esto quiere decir que las cosas me van bien aquí".
"Idiota" y "aprendiz de gurú"
Luis Enrique, que desde entonces ha dejado alguna que otra perla, como cuando en 2007 aseguró que "nunca entrenaría al Madrid; ni al Oviedo", protagonizará este mediodía la rueda de prensa más esperada desde que es entrenador del FC Barcelona.
El técnico sigue siendo el objetivo de los medios madrileños. La no sustitución de Messi frente al Eibar centró todas las tertulias televisivas y radiofónicas e incluso la portada de As, con el titular 'Luis Enrique bracea en chicle'. E incluso en un programa televisivo nocturno, un periodista de Marca, Miguel 'Látigo' Serrano, ya le ha faltado al respeto en sucesivas ocasiones, y sin consecuencias: le ha llamado "idiota" y "aprendiz de gurú", ha considerado que "está a años luz de Guardiola" y ha afirmado que en su día "financió a los ultras del Madrid".
Afortunadamente para Luis Enrique, se aísla de los medios y se centra en el balón. Y la respuesta no la dará hoy en la sala de prensa, sino mañana en el campo.
MD