Cuatro mineros informales murieron al quedar encerrados cuando realizaban trabajos de extracción de oro en una mina abandonada en la localidad de Retama, distrito de Parcoy, provincia liberteña de Pataz.
Dos de las víctimas fueron identificadas como Antonio y Esteban Torres Aponte, hermanos de 21 y 19 años respectivamente, así lo confirmó el fiscal provincial de Pataz, Asencio Alfonso Angulo.
La autoridad del Ministerio Público añadió que las otras dos víctimas mortales aún no han sido identificadas, pero se presume que serán primos.
