A propósito del viaje del presidente Maduro a China, Luis Vicente León aseveró que en ese país asiático “hace años aprendieron que sin empresa privada no hay paraíso”.
Por eso escribió en su cuenta en Twitter que “ojalá el presidente tenga la oportunidad de discutir con el gobierno chino la importancia del sector privado para garantizar la estabilidad económica”.
Para el presidente de Datanálisis, “no se puede estimular la producción ni la inversión sin garantizar condiciones adecuadas (…) y es obvio que no las hay”.
Insistió en que el aumento de la oferta de los bienes y servicios “no se puede decretar” y que solo puede resultar de “un modelo económico racional y estimulante”.
Además escribió que “no hay forma de restablecer la confianza del sector privado sin garantizar divisas, deuda, flexibilidad laboral y reconocimiento de costos”.
Dijo que rescatar la confianza y estimular la inversión privada son la única forma de mantener el abastecimiento.
En todo caso aclaró que surtir los anaqueles es más difícil en el primer trimestre, aunque ahora “aunado a expectativas negativas y a la caída de los ingresos”.
Aunque recordó que durante el cuarto trimestre de 2014 el abastecimiento mejoró y se inyectaron recursos al sector privado, dijo que no fue algo sostenible. “El gobierno ha hecho esfuerzos, sin anuncios, para que el sector privado continúe abastecido, pero el modelo hace insostenible la operación”, completó.
Lamentó que las “importaciones públicas hayan crecido como espuma sustituyendo las privadas”, pues, a su juicio, esto “aumenta dramáticamente la ineficiencia y la corrupción”.
De igual forma explicó que “es nula la disposición de las empresas de asumir el riesgo de importar con sus (propias) divisas sin garantías de recobro y precios controlados”. Y agregó:“Con ingresos petroleros altos, pero con un tipo de cambio absurdo y regalado, ya era imposible cubrir la demanda de divisas. Imagine ahora”.
De tal manera que advirtió que “mientras haya divisas petroleras y se mantenga el subsidio cambiario, con demanda infinita, no hay forma de controlar la escasez”.
Y es que según precisó el encuestador, inflación y escasez combinadas ya superaban en 2014 a la inseguridad como el principal problema para los venezolanos: “Y solo habíamos visto la punta de iceberg”.
