(Oslo, 2 de febrero. AFP).- Tras el impacto mundial del atentado contra el semanario satírico francés Charlie Hebdo, los defensores de la libertad de expresión dominan las nominaciones al premio Nobel de la paz para 2015.
“Este año volvemos a ver candidaturas que han dominado la actualidad en los últimos meses”, dijo a la AFP Olav Njoelstad, el nuevo director del Instituto Nobel y secretario del comité encargado de atribuir la prestigiosa recompensa.
La lista de candidaturas, que se cerró el 1 de febrero, es secreta pero las personas habilitadas a proponer candidatos (parlamentarios y ministros, ganadores del premio, algunos profesores de universidad) pueden anunciar públicamente el nombre de su favorito.
Entre los nombres propuestos figuran el danés Flemming Rose, que en 2005 publicó varias caricaturas de Mahoma en su periódico Jyllands-Posten, el bloguero saudí Raef Badaui o el estadounidense Edward Snowden.
Rose fue el impulsor de la publicación en 2005 de las caricaturas de Mahoma que levantaron una ola de protestas en varios países musulmanes.
“Dar el premio a un defensor constante de la libertad de expresión, incluso cuando tiene un coste personal, demostraría que los que intentan amordazar la libertad de expresión [...] nunca podrán lograrlo”, escribió del diputado noruego Michael Tetzschner, que propuso el nombre de Rose en una carta al comité Nobel citada por la agencia NTB.
Bajo la amenaza de los islamistas radicales desde hace una década, el Jyllands-Posten decidió, al contrario del resto de periódicos daneses, publicar el dibujo de Mahoma de la portada del primer número de Charlie Hebdo publicado tras los atentados del 7 de enero, que dejaron 12 muertos en la sede de la revista.
El papa, entre los candidatos
Otros de los nominados es Raef Badaui, un bloguero saudí condenado a diez años de prisión y 1.000 latigazos por haber “insultado” al islam, Se trata de una candidatura conjunta con su compatriota Walid Abul Jair, un abogado y activista de los derechos humanos también encarcelado en Arabia Saudí.
“Cuando hace algunas semanas todo el mundo decía ser Charlie, varios jefes de Estado asistieron al entierro del rey de Arabia Saudí, que viola todos los derechos humanos, ejecuta y azota a los que usan la libertad de expresión y trata a las mujeres peor que a los animales”, afirma la diputada noruega Karin Andersen, una de las impulsoras de este candidatura.
También se presentaron candidaturas para Edward Snowden, que reveló el programa de espionaje de la Agencia de Seguridad estadounidense (NSA) y de otro norteamericano, Daniel Ellsberg.
El nombre de este exfuncionario fue propuesto por la diputada noruega Marit Arnstad, que lo considera un precursor de los “alertadores” como Snowden porque en los años 1970 filtró documentos secretos del Pentágono sobre la guerra de Vietnam.
Entre los candidatos también figura el papa Francisco —propuesto por un diputado noruego musulmán—, el médico congoleño Denis Mukwege, los presidentes y expresidentes tunecinos Beji Caid Esebsi y Moncef Marzuki, la Campaña Internacional por la Abolición de las Armas Nucleares (Ican).
Otros posibles merecedores del premio son el estadounidense Gene Sharp, teórico de la resistencia no-violenta, Maggie Gobran —apodada la “Madre Teresa de El Cairo”— o un grupo de activistas favorables al pacifismo de la constitución japonesa.
La lista de candidaturas se cerró el 1 de febrero pero los cinco miembros del comité Nobel pueden añadir más nombres en su reunión de principios de marzo, antes de que se proclame a un ganador en octubre.