El maestro de cinetismo Carlos Cruz Diez es uno de los representantes del arte óptico de Venezuela. Para Cruz era un necesidad de su generación el ser visto, el querer decir, y hoy en día es un logro para su persona y para el país ser una referencia del arte internacional.
Para Cruz Diez, “el arte es una pasión casi religiosa porque es una necesidad vital”, no para trifunar ni para tener audiencia, sino porque la necesidad es comunicar, dijo a Brújula Internacional.
“Un artista no puede vivir en una sociedad autoritaria, porque un artista es un rebelde un desobediente. El arte es invención, es transformación, es apertura hacia el espíritu”, agregó.