La violación, la esclavitud sexual y el matrimonio forzoso son usados como táctica de terror en Siria e Iraq. Ocurre de forma generalizada, sistemática y con un alto grado de sofisticación, ejercida por la mayoría de las partes en conflicto, afirmó este jueves la Representante Especial del Secretario General de la ONU para esas cuestiones.
Zainab Bangura dijo en una conferencia de prensa en Nueva York, al concluir su misión a países de Medio Oriente, que según testimonios de sobrevivientes y testigos, las mujeres y las niñas están en situación de riesgo en todo momento, especialmente en áreas de combate, en zonas bajo el dominio de grupos armados, en puntos de control y cruces fronterizos, además de centros de detención.
Bangura describió algunas de las atrocidades de ese tipo.
"He oído testimonios sobre la venta y transferencia de mujeres y niñas entre combatientes de los grupos armados como parte de la política económica del conflicto. Las niñas son desnudadas y examinadas en bazares de esclavos, categorizadas y enviadas a Raqqa, Mosul u otras localidades, para ser distribuidas entre los líderes y soldados de ISIS.
La alta funcionaria destacó que ISIS ha institucionalizado la violencia sexual y la brutalidad contra las mujeres como un aspecto central de su ideología y sus operativos, usándola como táctica terrorista para avanzar sus objetivos estratégicos.
Bangura llamó a los actores estatales y no estatales a cumplir sus obligaciones ante las leyes internacionales humanitarias para prevenir esos abusos y castigar a los actores de esos crímenes.
