Las autoridades de la región metropolitana de Santiago decretaron hoy por decimosexta vez en lo que va del año preemergencia ambiental debido a la mala calidad del aire en la capital de Chile, de 6,3 millones de habitantes.
La medida, que en la semana se aplicó el miércoles y viernes pasados, prohíbe la circulación de un 20 % de los vehículos provistos de convertidores catalíticos, en este caso aquellos cuyas placas patentes terminen en los dígitos 5 o 6 y de un 60 % de los no catalíticos, cuyas matrículas terminen en 3, 4, 5, 6, 7 u 8.
La disposición, decretada por de la Intendencia (Gobernación) de Santiago rige desde las 07.30 (10.30 GMT) y las 21.00 horas (00.00 GMT del lunes) e incluye a los municipios aledaños de Puente Alto y San Bernardo.
La restricción de los vehículos no catalíticos es considerada intrascendente por los expertos, sobre la base de que no superan los 45.000 inscritos en la capital chilena, todos de más de 20 años de antigüedad, mientras los que poseen ese sistema llegan a 1,6 millones.
El intendente de Santiago, Claudio Orrego, reconoció esta semana que la restricción de circular a vehículos motorizados tiene un efecto relativo en el combate contra la contaminación del aire y aseguró que lo mas efectivo es la prohibición de usar calefactores a leña.
Según Orrego, en la ciudad hay unos 100.000 hogares provistos de esos calefactores, la mayoría situados en barrios acomodados del área oriental de la metrópolis.
El estado de preemergencia ambiental supone también la paralización de actividades de unas 1.350 industrias contaminantes y la recomendación de evitar las actividades al aire libre.
Santiago está situada en un valle rodeado de montañas, que durante el otoño e invierno impiden las corrientes de aire que disipan las partículas nocivas, a lo que se suma un fenómeno de inversión térmica, que mantiene ese material al nivel del suelo.
En las primeras horas de este domingo, una de las diez estaciones de vigilancia de la calidad del aire en la ciudad, correspondiente al municipio de El Bosque, en el área sur, marcaba nivel de preemergencia, de entre 300 y 400 microgramos de partículas nocivas por metro cúbico de aire.
Otras ocho estaciones marcaban nivel de alerta, de entre 200 y 300 y sólo una, correspondiente al municipio de Las Condes, marcaba una buena calidad del aire, inferior a 100.
