El primera base venezolano Miguel Cabrera, perteneciente a los Tigres de Detroit, dejó atrás oficialmente el bache ofensivo en el que comenzó la presente temporada de las Grandes Ligas.
Cabrera tuvo uno de los arranques más lentos de su carrera al ligar apenas para .220 (59-13) de average con tan solo un jonrón, seis remolcadas y .635 de OPS en sus primeros 15 partidos del año. No obstante, el maracayero se mantuvo trabajando arduamente para mejorar sus números.
El punto de inflexión para el criollo fue el pasado 24 de abril cuando el mánager de Detroit, Brad Ausmus, decidió no colocarlo en el lineup bengalí para que pensara cómo superar el slump que tanto lo estaba aquejando en las primeras de cambio.
“Cuando un pelotero cae en esos baches siempre trata de conseguir la solución lo más rápido posible, sin embargo, en algunas ocasiones no pueden ganar y lo mejor es que tengan un día de descanso para que puedan reencontrarse”, señaló Ausmus en aquella ocasión al Detroit Free Press luego de mandar a su jugador estrella al banco en el último cotejo de la serie contra los Indios de Cleveland.
Desde ese momento "Miggy" cambió radicalmente su desempeño en el plato y volvió a rendir como nos tenía acostumbrados. El ganador del Bate de Plata en 2015 acumula una cadena de ocho encuentros dando al menos un imparable, además de mantener un promedio al bate de .400 con seis extrabases, entre ellos tres cuadrangulares, y seis impulsadas en dicho período (no incluye la jornada de ayer).
Ante tal demostración en el cajón de bateo el aragüeño elevó considerablemente su average de .206 a .276 y ha jugado un papel importante para que los Tigres hayan alcanzado seis triunfos en sus ocho desafíos más recientes, lo que los metió de lleno en la lucha por el banderín de la División Central de la Liga Americana.
Por si fuera poco Cabrera ingresó a su mejor época del campeonato durante su trayectoria de 14 años en las mayores. El inicialista choca históricamente para .332 en el mes de mayo con un OBP de .403 y un OPS_de .979 lo que indudablemente plasma su regreso por la puerta grande.