El expresidente colombiano Álvaro Uribe comparecerá el próximo jueves ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes de Colombia por el caso de las interceptaciones ilegales llevadas a cabo durante su Gobierno, informaron este martes fuentes de su defensa.
Uribe "es el más interesado en ser escuchado y quiere escuchar, además, a las supuestas víctimas, pero no lo han dejado defenderse", comentó un letrado perteneciente al bufete de sus abogados defensores, Jaime Granados y Jaime Lombana.
El expresidente debe responder por esas escuchas, llamadas en Colombia "chuzadas", que fueron ejecutadas por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, central de inteligencia).
Las interceptaciones, que se conocieron a mediados de 2009, estuvieron dirigidas contra políticos opositores, magistrados, periodistas y defensores de los derechos humanos.
Uribe intentará por segunda vez dar su declaración después de que el pasado 16 de junio esa audiencia, solicitada por el propio expresidente, fuera suspendida a causa de un recurso jurídico de acusación contra dos de sus miembros por parte de los abogados de la exsenadora Piedad Córdoba, quien se declaró como una de las víctimas de las escuchas.
La misma fuente informó, además, a Efe que el expresidente Uribe (2002-2010) se excusó de acudir este martes a otra audiencia en la que participa como testigo en un proceso contra el abogado Sergio González, quien supuestamente instigó a un paramilitar a lanzar calumnias contra el magistrado Iván Velásquez, de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Ese hecho se dio cuando el entonces presidente Uribe mantenía una fuerte pugna con el poder judicial, por lo que ahora es reclamado como testigo en esa causa.
Uribe fue citado "con muy poco tiempo" de antelación, y por problema de su agenda, tuvo que excusarse, explicó la fuente.
La juez de esta última causa, abierta en 2008, tras las denuncias del magistrado Velásquez, convocó nuevamente a Uribe para comparecer el próximo 4 de noviembre, agregó el abogado del despacho de defensores del expresidente.
Uribe "es el más interesado en ser escuchado y quiere escuchar, además, a las supuestas víctimas, pero no lo han dejado defenderse", comentó un letrado perteneciente al bufete de sus abogados defensores, Jaime Granados y Jaime Lombana.
El expresidente debe responder por esas escuchas, llamadas en Colombia "chuzadas", que fueron ejecutadas por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, central de inteligencia).
Las interceptaciones, que se conocieron a mediados de 2009, estuvieron dirigidas contra políticos opositores, magistrados, periodistas y defensores de los derechos humanos.
Uribe intentará por segunda vez dar su declaración después de que el pasado 16 de junio esa audiencia, solicitada por el propio expresidente, fuera suspendida a causa de un recurso jurídico de acusación contra dos de sus miembros por parte de los abogados de la exsenadora Piedad Córdoba, quien se declaró como una de las víctimas de las escuchas.
La misma fuente informó, además, a Efe que el expresidente Uribe (2002-2010) se excusó de acudir este martes a otra audiencia en la que participa como testigo en un proceso contra el abogado Sergio González, quien supuestamente instigó a un paramilitar a lanzar calumnias contra el magistrado Iván Velásquez, de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Ese hecho se dio cuando el entonces presidente Uribe mantenía una fuerte pugna con el poder judicial, por lo que ahora es reclamado como testigo en esa causa.
Uribe fue citado "con muy poco tiempo" de antelación, y por problema de su agenda, tuvo que excusarse, explicó la fuente.
La juez de esta última causa, abierta en 2008, tras las denuncias del magistrado Velásquez, convocó nuevamente a Uribe para comparecer el próximo 4 de noviembre, agregó el abogado del despacho de defensores del expresidente.