La Fiscalía gala archivó hoy la denuncia por intento de violación contra el exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn, presentada por la periodista Tristane Banon, porque los hechos han prescrito.
El Ministerio Público indicó en un comunicado que no hay pruebas de intento de violación sino únicamente de agresión sexual, delito, sin embargo, que prescribe a los tres años.
"Cometidos en 2003 y revelados sólo en julio de 2011, estos hechos no pueden ser perseguidos porque la acción pública está sometida a la aplicación de la prescripción trienal en materia delictiva", agregó el Ministerio Público.
Strauss-Kahn se libra así de la persecución judicial en Francia, aunque Banon ya advirtió de que, en caso de que se archivara la causa penal, continuaría por la vía civil.
"¿Por qué la duda beneficia siempre al acusado y nunca a la víctima? Tenemos la certeza de que ha mentido en varias ocasiones, en Estados Unidos y en Francia", aseguró Banon en declaraciones a "Canal+".
Banon se decidió a presentar la denuncia en julio pasado, después de que Strauss-Kahn fuera acusado de intento de violación por la empleada de un hotel de Nueva York en mayo, acusación archivada en agosto por la vía penal en Estados Unidos, pero pendiente de un eventual proceso civil.
Ante la policía francesa, el exresponsable del FMI reconoció haber intentado besar a la periodista en el encuentro que ambos mantuvieron en un apartamento de París, al que Banon había acudido para entrevistar a Strauss-Kahn para un libro que estaba escribiendo.
El político siempre ha mantenido su inocencia y en una entrevista en televisión aseguró que Banon narraba una "escena imaginaria".
La periodista asegura que tardó tanto tiempo en presentar la denuncia por miedo a que nadie se lo creyera y porque su madre se lo recomendó. Banon mantiene que Strauss-Kahn se abalanzó sobre ella y trató de violarla.
En un programa de televisión emitido en 2007 ya había denunciado los hechos, pero pasaron desapercibidos porque la cadena omitió el nombre de Strauss-Kahn para evitar querellas.
EFE