(dpa) – Guerra de manifiestos en el Partido Socialista (Psoe): nada más
abandonar José Luis Rodríguez Zapatero La Moncloa, las aguas de su formación se
han agitado con la vista puesta en el Congreso Federal en el que los socialistas
españoles elegirán en febrero a su sucesor al frente de la secretaría
general del Psoe.
Después de que un grupo de dirigentes socialistas presentara el martes un
manifiesto bajo el título “Mucho PSOE por hacer”, reclamando la
renovación del proyecto socialista y criticando errores cometidos por
el gobierno Zapatero, varios ex altos cargos de ese Ejecutivo hicieron público
hoy otro, titulado “Yo sí estuve allí”. Un texto este último que reivindica la
gestión del gobierno socialista.
El trasfondo, según apuntan los medios españoles, es la batalla por la
secretaría general del partido entre la exministra de Defensa Carme Chacón y el
candidato del PSOE a las pasadas elecciones generales, el exvicepresidente y
exministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba.
Chacón, de 40 años, quiso hace meses competir por ser la candidata del PSOE a
las elecciones generales de noviembre. Sin embargo, acabó renunciando a
enfrentarse a Rubalcaba, de 60, en unas primarias dentro del partido en
las que Zapatero y los líderes regionales del PSOE acabaron proponiendo al ex
vicepresidente para conducir al partido hasta los comicios.
La exministra de Defensa aún no ha anunciado su intención de competir por el
liderazgo del PSOE que Zapatero deja vacante en febrero, pero en España se da
prácticamente por seguro. Y algunos medios apuntan al grupo en torno al
manifiesto “Mucho PSOE por hacer” como una posible plataforma para su
lanzamiento hacia la secretaría general.
De Rubalcaba también se espera que dé el paso adelante y algunos ven su
sombra detrás de la publicación del manifiesto “Yo sí estuve
allí”, algo que hoy negó el exsecretario de Estado para la UE Diego
López Garrido, uno de los firmantes.
Tras la derrota electoral de noviembre, el PSOE tiene “mucho trabajo
que hacer”, pero “no sería decoroso que quien estuvo allí de manera
evidente, y cabe decir entusiasta, aspirase ahora a sugerir lo contrario”,
aseguraron los firmantes de ese texto publicado hoy, en alusión a algunos
firmantes del primero que, como Chacón, formaron parte del gobierno de
Zapatero.
La crisis económica y la gestión que el gobierno de Zapatero hizo de ella,
con drásticos recortes para reducir el déficit público,
hundieron al PSOE, que en los comicios generales de noviembre sufrió la mayor
debacle electoral desde la Transición, con Rubalcaba como candidato a La
Moncloa.
Desde entonces fueron surgiendo voces pidiendo que el
exvicepresidente y exministro del Interior sea el nuevo líder de la
formación, pese a los resulados cosechados en los comicios generales.
Otros socialistas han considerado públicamente que está deslegitimado.
Unos defienden que en el congreso de febrero debe haber varios candidatos a
la secretaría general. Otros ha pedido que todos los militantes del PSOE
participen en unas primarias en la elección del secretario general,
algo no previsto en los estatutos del partido.
Y también hay voces que opinan que podría surgir alguien
joven, casi desconocido hasta el momento, que convenza de que tras la
histórica debacle del 20 de noviembre se necesita una renovación profunda del
aparato del partido. Ocurrió ya una vez: en el 35 congreso socialista, en el año
2000, emergió un joven diputado por León que se hizo con las riendas del PSOE
por sólo nueve votos de ventaja frente al siguiente aspirante. Era José Luis
Rodríguez Zapatero.