“El bombardeo de Baba Amr que comenzó al alba es el más violento desde hace cinco días. Caen dos cohetes por minuto”, afirmó a la AFP Rami Abdel Rahmane, jefe del OSDH, que citó a activistas que se encontraba en el lugar.
Otro miliciano, Hadi Abdalá, miembro del “Consejo de la Revolución de Homs” también afirmó a la AFP que el “bombardeo era de una violencia extrema, más que los demás días”.
Según la ONU, más de 300 personas han muerto desde el 4 de febrero en un “ataque indiscriminado contra las zonas civiles” en Homs.
El régimen que busca aplastar la protesta en esta tercera ciudad de Siria apodada “capital de la revolución”.
“La situación es trágica”, afirmó Abdalá.
“Hay mujeres embarazadas, gente que sufre enfermedades cardiacas, diabetes, y sobre todo hay heridos que no podemos evacuar”, agregó Abdalá.
“El lunes por la noche, tres militantes entraron en la ciudad a bordo de un vehículo que transporta pan, leche para niños y medicinas. Su vehículo fue alcanzado por un obús, todos han muerto carbonizados”, relató.
“Les dijimos que era peligroso, pero insistieron para venir a ayudar a los habitantes”, añadió Abdalá.