Según el director de Ciencias de la Organización Científica para Conservación de Animales Acuáticos (ORCA), Carlos Yaipén, la muerte de los mamíferos se debe a una "burbuja marina", una bolsa acústica que se forma al utilizar en la profundidad del mar los equipos para buscar petróleo.
"Las petroleras utilizan diferentes frecuencias de onda acústica y los efectos producidos por estas burbujas no son visibles a simple vista, sino que generan efectos posteriores en los animales. Eso puede producir la muerte por impacto acústico, no sólo de delfines, sino también de lobos marinos y ballenas", afirmó Yaipén al diario.
El especialista agregó también que el impacto acústico genera en los animales pérdida de equilibrio, desorientación y hemorragias internas.
La Asociación de Maricultores de Lambayeque descartó que los pescadores del lugar hayan asesinado a los delfines.
La causa de la muerte es investigada por el Instituto del Mar del Perú (Imarpe), que ha tomado muestras de los animales.