Gran sorpresa se llevó un hombre al descubrir un centenar de órganos humanos, al interior de una unidad de almacenamiento, que había comprado en una subasta en Estados Unidos (EE.UU.).
El nuevo propietario descubrió 10 cerebros, muestras de tejido, partes de pulmones y corazones, entre otros restos, al abrir el depósito, ubicado en Pensacola, al noroeste del estado de Florida.
El hombre se precipitó a abrir el contenedor al sentirse abrumado por un extraño olor.
Según informó el diario Northwest Florida Daily News en su edición digital, los investigadoresencontraron formaldehido, un compuesto químico utilizado para embalsamar y preservar cuerpos.
Asimismo, se conoció que la unidad de almacenamiento había sido alquilada previamente por el médico forense Michael Berkland.
Sobre el galeno se supo que en 1999, a Berkland se le había revocado su licencia en Missouri, luego que en 1996 se detectara que habría falsificado declaraciones en los informes de autopsias presuntamente diciendo que había tenido que dividir algunos especímenes de cerebro.
No han presentado cargos en contra del médico. Está en consideración si Berkland rompió leyes relativas a los desechos biomédicos y el almacenamiento y la eliminación de restos humanos.
Debido a que no estaban bien preservados, era poco probable que los órganos pudieran haberse vendido, refiere el Northwest Florida Daily News.
EFE
El nuevo propietario descubrió 10 cerebros, muestras de tejido, partes de pulmones y corazones, entre otros restos, al abrir el depósito, ubicado en Pensacola, al noroeste del estado de Florida.
El hombre se precipitó a abrir el contenedor al sentirse abrumado por un extraño olor.
Según informó el diario Northwest Florida Daily News en su edición digital, los investigadoresencontraron formaldehido, un compuesto químico utilizado para embalsamar y preservar cuerpos.
Asimismo, se conoció que la unidad de almacenamiento había sido alquilada previamente por el médico forense Michael Berkland.
Sobre el galeno se supo que en 1999, a Berkland se le había revocado su licencia en Missouri, luego que en 1996 se detectara que habría falsificado declaraciones en los informes de autopsias presuntamente diciendo que había tenido que dividir algunos especímenes de cerebro.
No han presentado cargos en contra del médico. Está en consideración si Berkland rompió leyes relativas a los desechos biomédicos y el almacenamiento y la eliminación de restos humanos.
Debido a que no estaban bien preservados, era poco probable que los órganos pudieran haberse vendido, refiere el Northwest Florida Daily News.
EFE
