El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, advirtió el lunes sobre el riesgo de una escalada "extremadamente peligrosa" del conflicto sirio en la frontera con Turquía, al abrirse el primer Foro Mundial de la Democracia, organizado en la sede del Consejo de Europa, en Estrasburgo.
"La escalada del conflicto en la frontera sirio-turca y las repercusiones de la crisis en el Líbano son extremadamente peligrosas", dijo Ban ante los más de mil políticos, expertos y militantes reunidos en este Foro.
El secretario general exhortó a dar una ayuda humanitaria más importante a la región. "Al acercarse el invierno, necesitamos que los donantes respondan de manera más generosa a las necesidades de las poblaciones en Siria y de los más de 300.00 refugiados en los países vecinos", dijo.
"La situación en Siria ha empeorado de manera dramática" y "plantea riesgos serios para la estabilidad de los vecinos de Siria y para toda la región", recalcó Ban.
Declarándose "profundamente preocupado por el flujo continuo de armas" entregadas tanto al gobierno sirio como a la oposición, instó a todas las partes a "abandonar la violencia y a dirigirse hacia una solución política", recalcando que ésa "es la única vía para salir de la crisis".
"Pido encarecidamente a los países que proveen armas que cesen de hacerlo. La militarización sólo agrava la situación", insistió.
Siria demuestra "hasta que punto las transiciones actuales, que inspiraron tantas esperanzas" aportaron "también incertidumbre y miedo". "El éxito no está garantizado. Construir la democracia lleva tiempo", estimó Ban.
Tras el discurso de Ban, la yemenita Tawakkul Karman, Nobel de la Paz 2011, instó a los miembros de la ONU a darle a la organización internacional los medios de actuar para promover la democracia.
"En nombre de la soberanía y de la no injerencia en los asuntos internos de los países, la ONU está atada de pies y manos frente al despotismo" estimó Karman.
El Consejo de Europa, organización paneuropea que reúne 47 países, desea convertir el Foro en una cita anual destinada a reunir "reformadores y dirigentes mundiales para buscar respuestas democráticas a los retos económicos, sociales y políticos".
El secretario general del Consejo de Europa, Thorbjorn Jagland, recalcó al inaugurar la reunión el desnivel en los países árabes entre "las esperanzas de 2011" suscitadas por las revueltas contra regímenes totalitarios y "la realidad de 2012".
"Muchos de los manifestantes, en particular los jóvenes, siguen estando frustrados, ya no a causa de una dictadura estancada y opresiva, sino porque los cambios no van suficientemente lejos", agregó Jagland, ex primer ministro noruego.
Ban inició el lunes en Estrasburgo una visita de dos días a Francia. Por la tarde se reunirá en París con el primer ministro Jean-Marc Ayrault y con el canciller Laurent Fabius. El martes será recibido por el presidente François Hollande.
AFP