La alcaldía de Nueva York anunció este domingo la evacuación obligatoria de 375.000 personas en zonas costeras de la ciudad ante la inminente llegada del huracán Sandy, que provocó la suspensión de su inmenso servicio de transporte público y de miles de vuelos.
"He decidido firmar una orden ejecutiva ordenando la evacuación de las áreas en la zona A" de la ciudad, que incluye el sur de Manhattan, Coney Island y Red Hook (Brooklyn, sureste de Nueva York), Rockaway Beach (Queens) y casi toda la costa de Staten Island, dijo el alcalde Michael Bloomberg en una conferencia de prensa.
"Estamos ordenando la evacuación por cuestiones de seguridad de 375.000 personas que viven en esas áreas", afirmó Bloomberg, anunciando también el cierre de las escuelas de la ciudad el lunes tras nuevos informaciones de una mayor amenaza de inundaciones en Nueva York.
En agosto de 2011, Bloomberg había ordenado la evacuación preventiva de unas 375.000 personas en esas zonas ante la llegada de Irene, aunque finalmente Nueva York había escapado casi ilesa de ese huracán que se había degradado a tormenta tropical a sus puertas.
La alcaldía abrió este domingo decenas de refugios en distintos puntos de la ciudad para alojar a esas personas. Bloomberg aconsejó a las personas que debían abandonar sus hogares a dirigirse también a casas de amigos y familiares en zonas seguras.
Sandy, con vientos máximos sostenidos de 120 km/h, considerado categoría uno en la escala de cinco niveles Saffir-Simpson, se dirigía este domingo hacia el noreste después de haber abandonado el sábado el Caribe dejando un saldo de 66 muertos en Haití, Cuba, República Dominicana, Jamaica y Bahamas.
Ante la amenaza que supone la megatormenta, las autoridades del estado de Nueva York detuvieron la noche del domingo el servicio de transporte público (metro, bus y tren) en la ciudad y alrededores desde el domingo a la noche, una medida que afectará a los millones de neoyorquinos que lo utilizan.
"El sistema de transporte es el alma de la región de la ciudad de Nueva York y suspender todos los servicios no es un paso sencillo. Pero mantener a salvo a los neoyorquinos es la primera prioridad", dijo el gobernador Andrew Cuomo en un comunicado.
De su lado, las compañías aéreas anularon más de 7.400 vuelos vuelos internacionales y domésticos en el este del país, principalmente en los aeropuertos de Nueva York, Washington y Filadelfia, según el sitio flightaware.
Con estas cancelaciones, decenas de miles de turistas podrían quedar varados al menos hasta el miércoles en Nueva York.
Largas colas se podían ver en supermercados de Manhattan, con la gente apurándose para abastecerse de agua, alimentos no perecederos, baterías y pilas y todo lo que pudiese ayudar a enfrentar la tormenta.
"Cuando logre entrar ya no va a quedar mucho. Voy a ver que consiguieron mis amigos", se quejaba Lisa Nichols, una estudiante de arte, frente a un supermercado de Union Square, en el sur de Manhattan.
Todas las obras de teatro y musicales de Broadway para el domingo a la noche y lunes fueron cancelados, indicó la directora de la liga de teatros del barrio de entretenimientos de Nueva York, Charlotte St. Martin.
La Bolsa de Nueva York anunció la noche del domingo que finalmente cerrará totalmente el lunes, después de informar horas antes que operaría a nivel electrónico.
Varias instituciones y organizaciones con sede en Nueva York, como la ONU, suspendieron también actividades previstas en el inicio de la semana.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, canceló una visita el lunes a la ONU en la que tenía previsto lanzar el "Año Internacional de la Quinua", un cereal que se cultiva en los ciertas regiones andinas desde tiempos incaicos.
Una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU con la presencia del mandatario guatemalteco Otto Pérez -cuyo país ejerce la presidencia del máximo órgano de Naciones Unidas- también fue anulada, indicó un vocero de la organización, Eduardo del Buey.
El Consejo de las América y el gobierno estadounidense suspendieron una presentación el martes de la subsecretaria de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson.
El último huracán en azotar Nueva York fue Gloria en 1985.
AFP