Un hombre y sus dos hijos fueron asesinados y la madre de los pequeños se encuentra en estado crítico en el norte de la India por un ajuste de cuentas de la familia de ella, informó hoy la Policía.
El suceso ocurrió la noche pasada en el pueblo de Kearha, situado en la provincia norteña india de Bihar, según fuentes policiales citadas por la agencia india IANS.
Los fallecidos son Dinaru Bind, un hombre de 28 años que murió tiroteado, y sus dos hijos, una niña de tres años y un niño de siete meses, que fueron degollados.
Los autores del crimen también cortaron el cuello a la esposa de Dinaru y madre de los niños, Rina Devi, que se debate entre la vida y la muerte en un hospital de la zona, de acuerdo con la versión policial.
Rina se había escapado con Dinaru hace cuatro años y se casó con él contra el criterio de su familia, y ambos habían regresado a su pueblo hace pocos meses.
Tanto el padre de Rina, Wakeel Bin, como sus hermanos Suresh y Sambhu, continuaron oponiéndose a la relación y ordenaron a la pareja que abandonaran el pueblo o se atuvieran a las consecuencias, según relató el agente de policía Suresh Kumar.
Las fuerzas de seguridad han puesto en marcha un dispositivo de búsqueda para arrestar a Wakeel Bind y sus hijos.
En la India, sobre todo en zonas rurales, son habituales los matrimonios concertados y los padres, en caso de que sus hijos quieran escoger pareja, acostumbran a vetar a candidatos de diferente religión o casta más baja.
Si los hijos optan por no atender la decisión de sus padres, el crimen de honor se manifiesta como el caso más extremo de intento, por alguna de las dos familias, de recuperar la dignidad perdida.
En Bihar se han producido varios crímenes de honor en los últimos meses: en agosto, un hombre mató a su hermana y su sobrina y tiró sus cadáveres al Ganges tras despedazarlos, también en represalia por haberse casado contra los deseos de la familia.