Se tejieron muchas especulaciones en torno a lo que sucedió, mientras se hundia. En el documental “Titanic: cien años de historia- misterios al descubierto”, elaborado por la Fundación Titanic, se desvirtúan algunas de las ideas que la película de James Cameron ayudó a reforzar en el imaginario colectivo.
"Nos hemos creado una historia a partir de otra historia", señaló el presidente de la Fundación, Jesús Ferreiro.
El trasantlántico Titanic, que se hundió en 1912, no fue atravesado por un icberg que llegó a la cubierta, tampoco se produjeron disparos, ni se mantuvieron las rejas cerradas.
El trasantlántico Titanic, que se hundió en 1912, no fue atravesado por un icberg que llegó a la cubierta, tampoco se produjeron disparos, ni se mantuvieron las rejas cerradas.
En este documental, Ferreiro reconstruyó la historia explicando la verdad sobre ciertos mitos que acompañan a la leyenda del famoso transatlántico. El mismos recuperó el testimonio de 123 supervivientes y conocido a 39 de ellos, entre los cuales se encontraba Millvina Dean, la última superviviente del Titanic.
"El Titanic no chocó contra un iceberg, simplemente lo rozó y lo hizo tan suavemente que hasta los oficiales en el puente de mando creyeron que lo habían salvado", señala Ferreiro.
Lo que pasó en realidad fue que el bloque el hielo chocó contra la parte más débil del casco del trasatlántico, que provocaron que saltasen algunos de los remaches. De este modo, entraron 9 toneladas de agua por segundo.
Según señala Ferreiro el Titanic se mantuvo 3 horas a flote gracias a la maniobra del primer oficial William Murdoch, primera persona que vio el iceberg.
"En realidad lo que Murdoch vio no fue un iceberg sino las luces del Titanic reflejadas en la pared negra de la montaña de hielo que tenía enfrente. Él creía ver otro barco", asegura y recalca que “nunca se produjo ni un solo tiro, ni hubo ningún suicidio de un oficial”.
Otro punto que toca el documental es sobre las rejas, que separaban a los viajeros de tercera y segunda clase, se mantuvieron cerradas, lo que impedía que accedan a los barcos salvavidas.
"Esas verjas nunca estuvieron cerradas mientras el Titanic se encontraba en alta mar. Solo se cerraban cuando estaba en puerto para pasar las revisiones de sanidad", aclara Ferreiro.
Pese a que Ferreiro sostiene que las películas desvirtúan la realidad, considera que el cine ha contribuido a que las personas conozcan sobre la historia del Titanic, especialmente la de James Cameron.EFE