Dos personas murieron, varias resultaron heridas y más de dos centenares fueron detenidas en saqueos a comercios registrados entre ayer y la madrugada de este viernes en seis ciudades de Argentina.
La cadena de hechos vandálicos, con supermercados como principal blanco, se inició en la mañana del jueves cuando un centenar de personas robó electrodomésticos y ropa en dos supermercados de Bariloche (provincia de Río Negro, 1.563 kilómetros al suroeste de Buenos Aires).
Pero los saqueos se replicaron entre la noche de este jueves y la madrugada de hoy en otras cinco ciudades, entre ellas Rosario (provincia de Santa Fe, 300 kilómetros de Buenos Aires), donde dos personas murieron, otras dos resultaron heridas y 137 fueron detenidas, con el decomiso de armas fuego y vehículos con mercadería robada a supermercados de empresarios chinos.
"Ninguna de estas personas (fallecidas y heridas) tienen que ver con el accionar policial. Desde anoche, cuando empezaron a ocurrir ciertos desmanes callejeros, se dio la orden al jefe de la policía de Santa Fe de trabajar con elementos disuasivos, sin armas con municiones de plomo", aseguró hoy en una rueda de prensa el secretario de Seguridad de Santa Fe, Matías Drivet.
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, dijo que los saqueos se registraron luego de que la ciudad sufriera el miércoles una fuerte tormenta, que produjo inundaciones en algunos puntos de la ciudad, aunque aclaró que las zonas donde se registraron los saqueos no fueron las más afectadas.
"Se utilizó estos hechos climáticos para generar hechos vandálicos. Ha habido autores y actores y hechos que no tienen nada ver con problemas sociales", dijo Lamberto.
En la localidad de Gobernador Gálvez, en la periferia sur de Rosario, también hubo saqueos a siete comercios, tras lo cual se detuvo a catorce personas, informaron fuentes oficiales.
En la provincia de Buenos Aires, la ciudad de Campana (82 kilómetros de Buenos Aires) registró el ataque a dos supermercados, una gasolinera y camiones, con un saldo de cien detenidos y una decena de policías heridos, según fuentes oficiales.
"No tengo el dato de quién puede estar detrás de eso, pero hay alguien que lo coordinó", dijo hoy el secretario de Gabinete de Campana, Claudio Rodríguez, a Radio 10, de Buenos Aires.
El jefe de la policía de la provincia de Buenos Aires, Hugo Matzkin, dijo que ya se ha "restaurado el orden deseado".
En tanto, en la vecina localidad de Zárate (86 kilómetros de la capital), fueron saqueados una treintena de pequeños comercios.
Por su parte, en Resistencia (provincia de Chaco, 1.015 kilómetros de la capital) siete integrantes de diferentes agrupaciones políticas que se habían manifestado en la tarde del jueves en un acto en esa ciudad fueron detenidos por la noche tras irrumpir en una discoteca, donde provocaron destrozos y robaron bebidas.
La cadena de hechos vandálicos, con supermercados como principal blanco, se inició en la mañana del jueves cuando un centenar de personas robó electrodomésticos y ropa en dos supermercados de Bariloche (provincia de Río Negro, 1.563 kilómetros al suroeste de Buenos Aires).
Pero los saqueos se replicaron entre la noche de este jueves y la madrugada de hoy en otras cinco ciudades, entre ellas Rosario (provincia de Santa Fe, 300 kilómetros de Buenos Aires), donde dos personas murieron, otras dos resultaron heridas y 137 fueron detenidas, con el decomiso de armas fuego y vehículos con mercadería robada a supermercados de empresarios chinos.
"Ninguna de estas personas (fallecidas y heridas) tienen que ver con el accionar policial. Desde anoche, cuando empezaron a ocurrir ciertos desmanes callejeros, se dio la orden al jefe de la policía de Santa Fe de trabajar con elementos disuasivos, sin armas con municiones de plomo", aseguró hoy en una rueda de prensa el secretario de Seguridad de Santa Fe, Matías Drivet.
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, dijo que los saqueos se registraron luego de que la ciudad sufriera el miércoles una fuerte tormenta, que produjo inundaciones en algunos puntos de la ciudad, aunque aclaró que las zonas donde se registraron los saqueos no fueron las más afectadas.
"Se utilizó estos hechos climáticos para generar hechos vandálicos. Ha habido autores y actores y hechos que no tienen nada ver con problemas sociales", dijo Lamberto.
En la localidad de Gobernador Gálvez, en la periferia sur de Rosario, también hubo saqueos a siete comercios, tras lo cual se detuvo a catorce personas, informaron fuentes oficiales.
En la provincia de Buenos Aires, la ciudad de Campana (82 kilómetros de Buenos Aires) registró el ataque a dos supermercados, una gasolinera y camiones, con un saldo de cien detenidos y una decena de policías heridos, según fuentes oficiales.
"No tengo el dato de quién puede estar detrás de eso, pero hay alguien que lo coordinó", dijo hoy el secretario de Gabinete de Campana, Claudio Rodríguez, a Radio 10, de Buenos Aires.
El jefe de la policía de la provincia de Buenos Aires, Hugo Matzkin, dijo que ya se ha "restaurado el orden deseado".
En tanto, en la vecina localidad de Zárate (86 kilómetros de la capital), fueron saqueados una treintena de pequeños comercios.
Por su parte, en Resistencia (provincia de Chaco, 1.015 kilómetros de la capital) siete integrantes de diferentes agrupaciones políticas que se habían manifestado en la tarde del jueves en un acto en esa ciudad fueron detenidos por la noche tras irrumpir en una discoteca, donde provocaron destrozos y robaron bebidas.
Envían fuerzas de seguridad federales
En Bariloche, donde 18 policías resultaron heridos, "la situación está absolutamente controlada", según afirmó hoy en un comunicado el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck.
El gobernador sostuvo que "es una situación generada por activistas", "en algunos casos de personas ligadas a la droga y al delito, y en otros de activistas políticos que están por fuera del sistema democrático, quienes buscan extorsionar permanentemente a las autoridades para beneficios propios".
"No quedan dudas que esto estuvo planificado y organizado", aseguró.
Tras los incidentes en Bariloche, la presidenta argentina, Cristina Fernández, a solicitud de Weretilneck, ordenó el envío de fuerzas de seguridad federales a esa ciudad del sur del país.
Cerca de cuatrocientos agentes de la Gendarmería ya llegaron a Bariloche, acompañados por el secretario de Seguridad argentino, Sergio Berni.
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, dijo este jueves que los hechos registrados en Bariloche "hablan de cuestiones muy particulares que no casualmente ocurren en una fecha como esta", cuando se cumplen once años de las violentas protestas sociales, que incluyeron saqueos y que terminaron con la caída del Gobierno del entonces presidente, Fernando de la Rúa, quien renunció el 20 de diciembre de 2001.
EFE
El gobernador sostuvo que "es una situación generada por activistas", "en algunos casos de personas ligadas a la droga y al delito, y en otros de activistas políticos que están por fuera del sistema democrático, quienes buscan extorsionar permanentemente a las autoridades para beneficios propios".
"No quedan dudas que esto estuvo planificado y organizado", aseguró.
Tras los incidentes en Bariloche, la presidenta argentina, Cristina Fernández, a solicitud de Weretilneck, ordenó el envío de fuerzas de seguridad federales a esa ciudad del sur del país.
Cerca de cuatrocientos agentes de la Gendarmería ya llegaron a Bariloche, acompañados por el secretario de Seguridad argentino, Sergio Berni.
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, dijo este jueves que los hechos registrados en Bariloche "hablan de cuestiones muy particulares que no casualmente ocurren en una fecha como esta", cuando se cumplen once años de las violentas protestas sociales, que incluyeron saqueos y que terminaron con la caída del Gobierno del entonces presidente, Fernando de la Rúa, quien renunció el 20 de diciembre de 2001.
EFE