El presidente del Centro Internacional de Estudios Políticos Arístides Calvani, Eduardo Fernández, aseguró que no tiene aspiraciones presidenciales para suceder a Hugo Chávez en el Palacio de Miraflores, como candidato de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Sion embargo, señaló que trabaja por la reconciliación de los venezolanos.
“No soy candidato, creo que mi posición debe ser la promoción de la sustitución de la confrontación (...) Me siento cómodo y trabajaría tanto con el gobierno como con la posición”, dijo el político venezolano, antiguo militante del partido político Copei.
Fernández aclaró que no participa en las reuniones políticas de la MUD para escoger al candidato presidencial, en caso de unas hipotéticas elecciones en el año 2013.
“Si se diera la hipótesis que el presidente Chávez anunciara en diciembre pasado, se debe convocar la elección como lo manda la Constitución. Debe convocarse con mucha altura con 5 cosas: porque Venezuela necesita un jefe del Estado, jefe de gobierno, comandante en jefe de la FAN, conductor de la política internacional, que se dé cuenta de que Venezuela no puede depender solo del petróleo y que conduzca una política económica eficiente”, dijo.
Eduardo Fernández, conocido como “El Tigre” cuando era el candidato presidencial por Copei en 1988, explicó que es la hora de convocar la unidad nacional. “Los venezolanos no ganamos nada con la confrontación inútil. La solución ideal es que el presidente reelecto recupere su salud y asuma la responsabilidad y cumpla su deber constitucional. Ojalá tengamos un gobierno serio y que tengamos una oposición mejor, que presente un camino cierto. Que se convierta realmente en alternativa democrática”.
Para el político, es necesario que los líderes del gobierno y la oposición dejen a un lado sus intereses personales para orientar al país. “Siento que la gente venezolana está angustiada porque el país está sin rumbo. Y el debate sigue siendo intrascendente. El país está a la deriva (…) Tenemos un presidente desaparecido y un gobierno que actúa en su nombre”, dijo.
A 24 años del estallido social del 27 de febrero, Fernández recordó que en Venezuela se vive un “clima de conflictividad social que parece orientarnos a la anarquía y a la violencia”, por lo cual hizo un llamado a la reconciliación teniendo como prioridad el bienestar de los venezolanos.
