El profesor univesitario y especialista en religiones monoteístas, Antonio Cova, explica que el Papa Benedicto XVI "seguramente vio lo que pasó con Juan Pablo II", en lo que respecta a la vejez que el último Papa tuvo que vivir.
"Nadie quizás tuvo una vejez más terrible que la de Juan Pablo II. Yo creo que eso pesó mucho,. pues es él quien recoje lo que el último Papa no pudo encarar, entre eso, la crisis de los Papas pederastas", señala Cova.
Ante la pregunta de por qué ha sido tan significativa la renuncia del Papa, el especialista opina que se debe a la naturaleza del oficio. "El Papa es el que va a ocupar la posición que, según la iglesia, le asignó a Pedro el propio Jesucristo, es decir, él es quien orienta todo, por lo que se estableció que es un cargo vitalicio", afirma.
Cova dice "no tener la menor duda" de que pronto se pueda dar el que haya sacerdotes casados. Afirma que "en términos de bioética la iglesia tiene que hincarle el diente a una cantidad de cosas que se han venido desarrollando".