El canciller de la República, Elías Jaua Milano, en su artículo de opinión de este lunes criticó los hechos de violencia que se desencadenaron el 15 de abril luego de conocerse el resultado electoral. “Capriles marcó el inicio de una jornada destructiva y sangrienta”.
“Como es propio del fascismo, vino el intento de invisibilidad a las víctimas fatales o rematarlas moralmente, ‘eran delincuentes, se mataron entre ellos mismos’ dijeron voceros de la oposición y de los medios privados secundaron el ajusticiamiento moral de los asesinatos políticos”, expresó.
A juicio de Jaua, estos hechos conforman un “plan para cubrir con el manto de la impunidad lo sucedido”, el cual se basa en “borrar las pruebas de las fatales consecuencias del verbo irresponsable y violento del gobernador Capriles”.
El también presidente de CorpoMiranda, criticó que el dirigente del partido Primero Justicia, Julio Borges, haya aseverado que “llegó la hora de la muerte de la revolución, en respuesta a detalló: “La revolución no murió, ni morirá, pero si murieron 8 hombres y mujeres humildes del pueblo y decenas están heridos (…) fascista ultramontano y político de utilería”.
Para finalizar, expresó: “El 15-A de 2013, lamentablemente, las advertencias hechas por el Comandante Chávez a lo largo de años se cumplieron, la burguesía descargó su odio contra el pueblo. Y eso que no ganaron, gracias a Dios y a más de siete millones y medio de chavistas”.
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