EFE-Los productores de naranja de Brasil, responsable por más de la mitad del volumen mundial de jugo de naranja, se preparan para una temporada difícil en 2013-14 a raíz de elevados costos de producción, pese a una cosecha récord y altos precios de la bebida.
"El mercado de la naranja atraviesa su peor momento en dos años: el consumo mundial se estanca, los costos de producción aumentan y los procesadores son cada vez más poderosos", señala el presidente del sindicato de productores Taquaritinga, en el estado de Sao Paulo, Marco Antonio do Santos.
Los naranjos brasileños se hundieron bajo el peso de la fruta en estas dos últimas temporadas, permitiendo al país producir un estimado de 1,4 millones de toneladas de jugo de naranja en 2012-2013, una cifra bastante superior al millón de toneladas previsto para la cosecha 2013-2014.
Estas cosechas récord confirmaron a Brasil como primer productor y exportador mundial de jugo de naranja, pero también aumentaron los stocks mundiales mientras las exportaciones brasileñas decrecen regularmente desde 2007.
La sobreproducción no implica precios a la baja -se han triplicado desde 2005 para alcanzar los 2.300 dólares la tonelada de jugo concentrado en 2012- ya que los gastos de producción de los cultivadores explotan.
Brasil, en pleno desarrollo, ha actualizado su código laboral y aumentado el salario mínimo. El arriendo de la tierra y el precio de los productos fitosanitarios, ligado a la cotización de petróleo, también aumentan.
"El gobierno calculó que teníamos un costo de producción de 10,10 reales (unos 3,70 euros) por caja (de 40,8 kg) mientras que la vendemos a siete u ocho reales", afirma do Santos.
A raíz de la sobreproducción pasada, los productores no tuvieron más remedio que dejar pudrir 30 millones de cajas de la fruta, a falta de capacidad de procesamiento suficiente.
"En el 'citrus belt' de Sao Paulo, la mitad de las explotaciones de naranja desapareció en 10 años y sólo las más productivas sobreviven", añade Santos. "Los otros productores se vuelcan a la caña azucarera, el maíz o la soja".
Según datos de la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), 36.700 hectáreas de naranjos fueron desarraigados entre 2012 y 2013.
Los productores independientes (no vinculados a una usina de procesamiento) sufren también la concentración creciente de industrias de las que dependen para exprimir, conservar y comercializar el jugo.
Tres procesadores, reunidos en el seno de Citrus BR, monopolizan así 97% del jugo de naranja exportado por Brasil : Cutrale, Citrosuco y el grupo francés Louis Dreyfus Commodities.
"Nos unimos porque los embotelladores mismos se fusionan", explica Ibiapaba Netto, portavoz de Citrus BR, citando la reciente unión entre Refresco y Gerber Emig.
"Tampoco podemos aumentar el precio de compra a los productores porque el jugo de naranja tiene nuevos competidores: las bebidas energizantes, los jugos multivitamínicos, los tés fríos, las aguas aromatizadas e incluso el jugo de manzana chino, muy barato", añade.
En desacuerdo sobre el reparto del valor agregado, productores y procesadores concuerdan en una cosa: el potencial del mercado brasileño donde los jugos de naranja puros casi no existen.
"Brasil está en pleno crecimiento. En unos años, nuestro país puede tener tanta gente que tome jugo de naranja industrial como Alemania, que es hoy el mayor consumidor mundial per cápita", pronostica Marco Antonio do Santos.
