EFE) - El Tribunal Popular Intermedio de Chongqing (centro de China) condenó hoy a 13 años de cárcel por aceptación de sobornos y corrupción al antiguo alto cargo local Lei Zhengfu, cuyo caso se destapó tras protagonizar un video de alto contenido sexual,
Lei, de 55 años y secretario del Partido Comunista de China (PCCh) del distrito de Beibei, también tendrá que pagar una multa de 300.000 yuanes (48.000 dólares o 37.000 euros), informó la agencia oficial Xinhua.
La destitución de Lei, en noviembre de 2012, y su posterior detención se produjeron tras aparecer en un vídeo en el que mantenía relaciones sexuales con una supuesta amante, y que encontró una amplia difusión en las redes sociales.
El condenado aun no ha decidido si apelará la sentencia, informó Xinhua.
Durante el juicio, Lei aseguró que no recibió sobornos y que, con respecto al polémico vídeo, “mantenía una relación genuinamente amorosa” con la muchacha que aparecía en las imágenes, Zhao Hongxia, que tenía entonces 18 años.
La acusación señaló que Lei aceptó sobornos de cerca de 500.000 dólares por parte de constructores locales, quienes contrataron a Zhao para que mantuviera relaciones sexuales con el alto funcionario y grabaron sus escarceos para chantajearle.
En otra sentencia dictada hoy en un juicio exclusivamente dedicado al presunto chantaje con vídeos sexuales se condenó a seis personas a penas de prisión de entre 18 meses y 10 años, entre ellas la mujer que aparecía en el vídeo.
Zhao fue condenada a dos años de prisión, aunque la sentencia ha quedado suspendida, lo que en el Derecho chino implica que podría conmutarse por un castigo menor si pasado ese tiempo la mujer muestra buena conducta.
El acusado Xiao Ye recibió la mayor condena, de 10 años, al ser considerado el principal responsable de una red de chantaje contra políticos a los que facilitaba encuentros sexuales para grabarlos en vídeo y usar posteriormente las imágenes.
El PCCh endureció el código disciplinario para sus altos cargos en los últimos años tras la aparición de varios escándalos y ordenó serios castigos para aquellos que practicaran “conductas impropias” como la de tener amantes, algo al parecer frecuente entre las altas instancias.
En la ciudad de Chongqing se produjo, también en 2012, uno de los mayores escándalos políticos de las últimas décadas en China, después de que la esposa del entonces máximo líder de la municipalidad, Bo Xilai, fuera condenada por el asesinato de un empresario británico.
De hecho, el propio Bo, estrella emergente en el régimen hasta su caída en desgracia el pasado año, afronta también acusaciones de haber mantenido relaciones sexuales con múltiples amantes.
Chongqing, en el curso medio del Yangtsé, es una de las mayores ciudades del país y ha experimentado un gran desarrollo en las últimas décadas, pero se ha convertido también en una fuente inagotable de escándalos y polémicas.
Con Bo aún en el poder, en los años 2009 y 2010, Chongqing se hizo famosa por la lucha que sus autoridades emprendieron contra las mafias locales, una campaña que llevó a prisión a algunas de las más altas instancias judiciales y policiales de la municipalidad.