Esta ignición, provocada por la ionización de la atmósfera debido a la presencia de lluvias acompañadas de una tormenta eléctrica, no representó peligro alguno para las instalaciones de la refinería ni para las comunidades aledañas al CRP.
El personal de la Gerencia de Operaciones ejecutó las maniobras que condujeron al control de las llamas, las cuales fueron extinguidas a las 8:30 de la noche.
PDVSA ratificó que las labores de procesamiento en el CRP se desarrollan con total normalidad.