Fernando Torres, la amenaza para el Barça
Hubo un tiempo en que ganar en el Camp Nou era una misión imposible para cualquiera ante un equipazo entrenado con mano izquierda por Frank Rijkaard y liderado en el campo por Ronaldinho, Eto'o y compañía. Imposible para todos menos para el Atlético de Madrid de Fernando Torres.
Nadie triunfó en el Estadi en la Liga entre dos victorias del Real Madrid (ambas por 0-1) entre el 6 de diciembre de 2003 y 23 de diciembre de 2007. Nadie en cuatro años salvo los colchoneros, siempre en febrero y siempre con el 'Niño' como implacable verdugo.
Solo el Atlético, un año con César Ferrando (0-2) y otro con Pepe Murcia (1-3) en el banco, fue capaz de tumbar en su casa a los de Rijkaard en las dos Ligas (2004-05 y 2005-06) conquistadas por el germen del 'Pep Team'. Torres marcó dos goles en 2005 y dos más en 2006. Fueron cuatro de los siete que anotó en 10 enfrentamientos en el Barça. Los tres restantes fueron en el Calderón.
La historia del 'Niño' con el Camp Nou siempre será especial. Nunca olvidará que su estreno en Primera fue allí con 18 años el 1 de septiembre de 2002 en un 2-2 contra el Barça de Van Gaal. Ya solo Xavi, hoy lesionado, queda de aquella plantilla barcelonista amén de Luis Enrique como entrenador. El de Fuenlabrada, que ya había ganado la Eurocopa Sub-16 (2001) y Sub-19 (2002) con Iniesta, llevaba 16 meses en el primer equipo colchonero pero en Segunda A.
El verano de 2007, harto de no levantar trofeos como rojiblanco, fichó por el Liverpool y el Atlético dejó de ganar en el Estadi. De hecho, no lo ha vuelto a hacer sin Torres. Desde su última visita como colchonero (1-1 en la 2006-07), el balance es de seis derrotas y dos empates en la Liga, una derrota en la Copa, un empate en la Supercopa y un empate en la Champions.
Pero Fernando sí regresó a Barcelona durante estos siete años y medio lejos de casa. Se presentó a la chita callando el 24 de abril de 2012 tras 15 meses en el Chelsea. Y no falló. Con el Barça encerrando a los de Roberto di Matteo en pos de un gol que diera el pase a la final de la Champions saltó al césped por Drogba a falta de 10 minutos. Messi ya había fallado el penalti del 3-1. Y en el 92' se quedó de 'palomero', Ashley Cole envió un pelotazo desde su área.
Corrió, se plantó ante Valdés, le regateó, sentenció al Barça y acabó de vaciar a Guardiola. Pep citó para la mañana siguiente a Rosell, Bartomeu y Zubi en su casa. Lo dejaba. Hoy, tras un fugaz paso por el Milan, Torres regresa a la Liga y al Camp Nou con Luis Enrique más en entredicho que nunca.