Las bolsas de Asia caían el lunes en un comercio mustio en momentos en que los inversores optaban por la discreción sobre el valor antes de unas reuniones de bancos centrales de Europa y un importante reporte de nóminas de empleo en Estados Unidos.
El índice MSCI de acciones asiáticas no japonesas cedía levemente a 478,58 puntos. Las acciones en Australia cerraron con una baja de un 0,4 por ciento, mientras que los valores de Corea del Sur perdieron un 0,6 por ciento.
Los mercados en Japón estaban cerrados por un feriado.
Las acciones en China continental cotizaban planas con el sector inmobiliario débil después de que se reportó que la ciudad sureña de Shenzhen aumentó el pago mínimo inicial en la compra de segundas viviendas para frenar el aumento de precios.
"Es un comienzo lento y la gente es cauta antes de algunos eventos clave esta semana", dijo Jackson Wong, vicepresidente de Tanrich Securities para la venta de acciones.
En los mercados de divisas, el dólar seguía bien apoyado debido a datos optimistas de manufactura en Estados Unidos que avivaron la especulación que la Reserva Federal podría reducir sus compras de bonos en diciembre y no en marzo como muchos en el mercado anticipan actualmente.
El índice dólar, que sigue el desempeño del billete verde frente a seis divisas, se mantenía firme en 80,725 luego de subir el viernes a un máximo de seis semanas. También se apreciaba contra el yen a 98,74 unidades.
El dólar exhibía un mejor desempeño frente al euro, que fue socavado por la especulación de que el Banco Central Europeo (BCE) tendría que aliviar adicionalmente su política monetaria de cara a unas noticias decepcionantes sobre el desempleo y una lectura sorprendentemente baja de la inflación.
El euro llegó a caer hasta 1,3442 dólares el lunes, antes de recuperarse a 1,3488 unidades, muy por debajo de su máximo reciente de 1,3832 dólares. El BCE celebra una reunión de política monetaria el jueves y estará bajo una intensa presión para estimular la economía.
El Banco de Inglaterra sostendrá su reunión de política el jueves y se espera que se abstenga de modificar su curso tras una racha recientemente de mejores datos económicos.
Otro gran acontecimiento para los mercados vendrá el viernes con un reporte de empleo en Estados Unidos que se espera muestre un modesto aumento de tan sólo 125.000 en octubre, en medio de cierta incertidumbre sobre el impacto del cierre parcial del Gobierno federal.
Un reporte débil, y en particular cualquier aumento en la tasa de desempleo, podrían inclinar a la Fed a reducir su estímulo en diciembre.
En los mercados de materias primas, el oro al contado cotizaba a 1.313 dólares la onza, tras haber caído desde un máximo de 1.361,60 dólares la semana pasada. El cobre bajaba un 0,5 por ciento, a 7.207 dólares la tonelada.
Los precios del petróleo se estabilizaban tras las pérdidas de la semana pasada luego de que un dólar más firme y un amplio suministro contrarrestaban las preocupaciones sobre una caída en las exportaciones de crudo libio.
El crudo Brent de Londres para entrega en diciembre subía 28 centavos, a 106,19 dólares el barril. El petróleo estadounidense cotizaba estable en 94,61 dólares el barril.
El índice MSCI de acciones asiáticas no japonesas cedía levemente a 478,58 puntos. Las acciones en Australia cerraron con una baja de un 0,4 por ciento, mientras que los valores de Corea del Sur perdieron un 0,6 por ciento.
Los mercados en Japón estaban cerrados por un feriado.
Las acciones en China continental cotizaban planas con el sector inmobiliario débil después de que se reportó que la ciudad sureña de Shenzhen aumentó el pago mínimo inicial en la compra de segundas viviendas para frenar el aumento de precios.
"Es un comienzo lento y la gente es cauta antes de algunos eventos clave esta semana", dijo Jackson Wong, vicepresidente de Tanrich Securities para la venta de acciones.
En los mercados de divisas, el dólar seguía bien apoyado debido a datos optimistas de manufactura en Estados Unidos que avivaron la especulación que la Reserva Federal podría reducir sus compras de bonos en diciembre y no en marzo como muchos en el mercado anticipan actualmente.
El índice dólar, que sigue el desempeño del billete verde frente a seis divisas, se mantenía firme en 80,725 luego de subir el viernes a un máximo de seis semanas. También se apreciaba contra el yen a 98,74 unidades.
El dólar exhibía un mejor desempeño frente al euro, que fue socavado por la especulación de que el Banco Central Europeo (BCE) tendría que aliviar adicionalmente su política monetaria de cara a unas noticias decepcionantes sobre el desempleo y una lectura sorprendentemente baja de la inflación.
El euro llegó a caer hasta 1,3442 dólares el lunes, antes de recuperarse a 1,3488 unidades, muy por debajo de su máximo reciente de 1,3832 dólares. El BCE celebra una reunión de política monetaria el jueves y estará bajo una intensa presión para estimular la economía.
El Banco de Inglaterra sostendrá su reunión de política el jueves y se espera que se abstenga de modificar su curso tras una racha recientemente de mejores datos económicos.
Otro gran acontecimiento para los mercados vendrá el viernes con un reporte de empleo en Estados Unidos que se espera muestre un modesto aumento de tan sólo 125.000 en octubre, en medio de cierta incertidumbre sobre el impacto del cierre parcial del Gobierno federal.
Un reporte débil, y en particular cualquier aumento en la tasa de desempleo, podrían inclinar a la Fed a reducir su estímulo en diciembre.
En los mercados de materias primas, el oro al contado cotizaba a 1.313 dólares la onza, tras haber caído desde un máximo de 1.361,60 dólares la semana pasada. El cobre bajaba un 0,5 por ciento, a 7.207 dólares la tonelada.
Los precios del petróleo se estabilizaban tras las pérdidas de la semana pasada luego de que un dólar más firme y un amplio suministro contrarrestaban las preocupaciones sobre una caída en las exportaciones de crudo libio.
El crudo Brent de Londres para entrega en diciembre subía 28 centavos, a 106,19 dólares el barril. El petróleo estadounidense cotizaba estable en 94,61 dólares el barril.
REUTERS