El presidente de Uruguay, José Mujica, un exguerrillero de 78 años que se declara abiertamente ateo, exhortó hoy a sus compatriotas a leer uno de los últimos mensajes del papa Francisco, del que dijo que "se las trae" y al cual comparó con Juan XXIII.
Durante su espacio semanal en Radio Uruguay (emisora estatal), Mujica se refirió durante media hora a la Exhortación Apostólica titulada Evangelii Gaudium (La Alegría del Evangelio), escrita por el pontífice y publicada el pasado 26 de noviembre.
Según el gobernante uruguayo, en ese documento el papa "nos está sacudiendo, planteándonos cosas que seguramente lastiman pero que nos retratan en el fondo la hondura de los problemas que enfrenta el mundo de hoy".
"Vale la pena e invito a la gente a que consiga este documento que está en internet, del papa Francisco, no para tomarlo como un catecismo sino para pensarlo en la profundidad de estas cosas", afirmó.
Mujica destacó del mensaje papal las críticas a la economía de mercado y a "las teorías del derrame, que suponen que todo crecimiento económico favorecido por la libertad del mercado logra provocar por sí mismo mayor equidad e inclusión social en el mundo", señaló citando al pontífice.
Mujica subraya otras reflexiones del papa como que en el mundo actual impera "la globalización de la indiferencia", que los seres humanos somos "incapaces de compadecernos de los demás" y que la "cultura de bienestar nos anestesia".
"No tiene desperdicio, es, por su natural responsabilidad, una clarinada para interpretar en profundidad muchos de los males que nos aquejan en nuestro tiempo", dijo Mujica de Francisco.
El exlíder de la guerrilla tupamara, que pasó catorce años en la cárcel, la mayoría durante la dictadura (1973-1985), coincidió también en la visión del pontífice de que "hasta que no se revierta la exclusión y la inequidad en una sociedad y entre los distintos pueblos será imposible erradicar la violencia".
"Cuantas cosas para pensar que encierran estas afirmaciones de este papa que se las trae" y que "naturalmente está levantando polvaredas", opinó Mujica, para quien existen similitudes entre ese mensaje y el que se escuchó en la II Cumbre de presidentes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), celebrada en La Habana la semana pasada.