AVN) - La misión de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) inició este lunes en la mañana las jornadas de trabajo en Caracas, Venezuela, como parte de su segunda visita para participar en la Conferencia Nacional de Paz, promovida por el presidente de la República, Nicolás Maduro, que impulsa el diálogo con todos los sectores del país.
El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, informó a través de su cuenta en Twitter que los ministros para Relaciones Exteriores de los países miembros del bloque regional sostendrán en primer lugar una reunión interna.
Luego -añadió- los cancilleres se reunirán con el canciller venezolano Elías Jaua Milano y con el presidente Nicolás Maduro.
Patiño acotó que la agenda también prevé un encuentro en la tarde de este lunes con representantes de la denominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que aglutina a parte de la oposición venezolana.
La Cancillería venezolana informó que la noche de este domingo arribaron al país los ministros suramericanos de Surinam, Winston Lackin; de Brasil, Luiz Figueiredo; de Argentina, Héctor Timerman; de Uruguay, Luis Almagro; de Chile, Heraldo Muñoz y de Bolivia, David Choquehuanca, quienes participarán en las jornadas previstas para este lunes y martes.
Asimismo se sumaron a la misión Patiño y su homóloga de Colombia, María Ángela Holguín.
Jaua ha dicho que sus pares suramericanos “van a apoyar, acompañar, asesorar el diálogo en el marco de la Conferencia Nacional por la Paz, para terminar de borrar esa corriente violenta, extremista, que tanto dolor y sufrimiento ha causado a nuestro pueblo”.
Esta segunda visita se realiza con el objetivo de dar cumplimiento al Comunicado de la I Reunión de la Comisión de Cancilleres de Unasur, mediante el cual se determinó que el 7 y 8 de abril se desplazaría a Caracas una delegación para dar continuidad al proceso iniciado por la referida instancia ministerial.
Una primera delegación de la Unasur visitó el país el 25 y 26 de marzo, días en que se reunieron con representantes de la iglesia católica, estudiantes bolivarianos y de la derecha, y empresarios, tras lo cual emitieron un comunicado en el que instó a deponer todas las acciones violentas en el país y condenó “cualquier tentativa de ruptura del orden constitucional”.
Desde el pasado 12 de febrero, grupos de la ultrderecha y terroristas iniciaron acciones violentas en algunas ciudades del país causando el asesinato de 39 personas y el asedio a numerosas instituciones del país.
El Ejecutivo y el pueblo organizado han neutralizado la violencia a través de movilizaciones pacíficas y la contención de los grupos de ultraderecha por parte de los órganos de seguridad.
Actualmente, los desestabilizadores han sido reducidos a pequeños focos localizados en municipios donde gobiernan alcaldes opositores, solapados por la inacción de las policías locales.