EFE) - El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo hoy que no abandonará la mesa de diálogo con la oposición y que espera que el otro bando tampoco lo haga, tras asegurar que los dirigentes opositores que han aceptado conversar con su Gobierno han recibido “grandes presiones”.
“Hay muchas presiones para destruir los niveles básicos de diálogo que tenemos con la oposición política. Yo no me voy a parar (levantar) de la mesa de diálogo, espero que ellos tampoco se paren”, dijo el presidente durante su programa de radio “En contacto con Maduro”.
El gobernante indicó que “ya el hecho de estar dialogando, debatiendo, es un avance democrático importante” y señaló que es “normal” que existan diferencias en los temas que se han puesto sobre la mesa de discusión desde que se inició el proceso de diálogo el 10 de abril pasado.
Las declaraciones del presidente se produjeron horas después de que la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anunciara que el diálogo iniciado con el Gobierno está en crisis y que volver a reunirse con el Ejecutivo dependerá de que éste tenga un gesto que demuestre su disposición a conversar.
“Envío mi mensaje un buena voluntad para seguir debatiendo, seguir dialogando”, reiteró Maduro.Maduro dijo que “no es automático” que tras poner sobre la mesa un tema, exista la obligación de aprobarlo o de lo contrario se suspende el diálogo.
Además, comentó que le han informado de la posibilidad de que llegue al país para incorporarse como acompañante al proceso de diálogo el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolini, y le dio la bienvenida por adelantado.
“Si la reunión del jueves se ratifica con la presencia de nuestro querido secretario de Estado, Pietro Parolini y los cancilleres de Ecuador, Colombia y Brasil, ahí estará como un clavel el Ministro (de Interior, Miguel) Rodríguez Torres llevando toda la información”, dijo al referirse a los hechos violentos que atribuye a la oposición.
Insistió en que la mesa de diálogo “tiene que seguir siendo un espacio de encuentro” para construir “una agenda nacional donde surjan acuerdos que favorezcan a todo el país” y subrayó que no se parará “jamás” de una reunión donde “se hable de la paz”.
“Espero que nadie se deje presionar por factores externos y no los obliguen a, una vez más, servir a intereses distintos de los intereses del país”, apuntó.
Para el jueves estaba fijada la cuarta reunión para el diálogo con la presencia de los cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), aunque los representantes de la MUD han anunciado que hablarán con los ministros para ponerlos al tanto de “lo gravemente comprometido que está el diálogo”.
El Gobierno y la oposición abrieron un proceso de diálogo el 10 de abril para tratar de encontrar una salida a la crisis política desatada con el inicio de las protestas contra el Ejecutivo el 12 de febrero, que hasta el momento dejan un saldo oficial de 42 muertos y más de 800 heridos.