“Ya no se puede ni siquiera salir a trotar, a las autoridades se les escapó de las manos el tema de la seguridad”, eran parte de los comentarios que se escucharon en las afueras del hospital***
Alba Roquez
Fotos y texto
Tinaqullo, 03 de julio.- Faltando pocos minutos para las 6:00 de la tarde, la unidad de rescate de Protección Civil, trasladó al hospital “Joaquina de Rotondaro” a Santiago José Aular Parra; él, pasó a formar parte de la lista de los tinaquilleros que de manera injusta, sin tener cuentas pendientes con nadie, ha caído en manos de los llamados “gatillos alegres” que andan en muchas de las calles del municipio “cazando” a sus víctimas para desgraciarles la vida.
Un hecho que conmocionó a gran parte de la población, al gremio de médicos de la municipalidad, enfermeras y a todos los trabajadores del Instituto de Prevención y Asistencia Social para el Personal del Ministerio de Educación (IPASME) Tinaquillo; todos ellos, se concentraron en la puerta del morgue a llorar y lamentar lo que había sucedió debido a que, Aular no soportó el disparo que le dieron en la región intercostal izquierda y murió.
Este hombre con tal solo 35 años, no logró conquistar todos sus sueños junto a su esposa e hijos de 14 y 9 años, quienes lamentaban en llanto la pérdida de su padre y amigo, como así lo manifestaban. Se desempeñaba como vigilante en dicho ente y se conoció, que también era profesor de educación física; además, formaba parte del equipo de dominó y futbolito de la institución en la que laboraba.
Cabe mencionar que Aular, era primo del abogado y talentoso locutor tinaquillero Mauro Aular y tío de Yoxibeth Camacho Rodríguez, trabajadora del departamento de administración de la alcaldía Bolivariana de Tinaquillo, ya que era hermano de su señora madre, Carmen Rodríguez.
“Santi”, como era llamado por sus compañeros de trabajo tenía como costumbre trotar todas las tardes en el sector “La Hilandería” y cumpliendo tal rutina, fue que lo asesinaron para robarlo.
“No entendemos porque la gente se ensaña tan feo, por qué matan por matar como si salieran y se gozaran de hacerlo, por qué tu gran amigo, hombre respetuoso y honesto”, eran algunas de las frases de médicos que se apersonaron al lugar.
En medio de lágrimas y mucho pesar por tan inesperado acontecimiento que enluta a la familia Aular Parra, la Jefa de Personal del IPASME, contó que Santiago se estaba preparando para un viaje que tenía que hacer este viernes a la ciudad de Caracas ya que, su responsabilidad era tanta, que iba a representar en la capital, a la sede de Tinaquillo de la referida institución en una mesa de seguridad.
En medio de la multitud que se mantuvo en las afueras del hospital hasta que sacaron el cuerpo de Santiago José, fue posible escuchar como una de sus compañeras lo catalogaba como un hombre ejemplar, buen padre, trabajador, honesto, responsable, educado, carismático; en fin, “todo un señor”.
El ahora occiso, vivía en la comunidad de “Villa Clara” y con su fallecimiento por tantas muestras de afecto que le demostraron quedó claro, que además de ser un ciudadano bueno, inocente que como otros tantos cayó en mano de la delincuencia, dejó un vacío inmenso en el corazón de muchas personas que al momento en que lo sacaban de la morgue entre llanto se dedicaron a bendecirlo en todo momento.