Altos funcionarios de la ONU han expresado en las últimas horas gran preocupación por informaciones alusivas a actos de violencia, incluso sexual, contra numerosas mujeres y también adolescentes de comunidades minoritarias en Iraq.
El representante de la ONU en ese país, Nickolay Mladenov, y la representante del Secretario General sobre Violencia Sexual en Conflictos, Zainab Bangura, manifestaron que los raptos, detenciones y violaciones de mujeres cristianas, Yazidis y de otras minorias que se reportan son alarmantes.
Precisaron además en un comunicado que unas 1.500 personas de esas comunidades podrían haber sido convertidas en esclavas sexuales por el grupo terrorista Estado Islámico.
Mladenov y Bangura subrayaron que los grupos armados que realizan actos de violencia sexual están cometiendo una grave violación de los derechos humanos, lo que puede ser considerado crímenes de guerra y contra la humanidad.
