Los sacerdotes que abusan de niños "son antropófagos", dijo el papa Francisco en una entrevista con la cadena mexicana Televisa en la que también dijo tener la sensación de que su pontificado, iniciado hace dos años, "va a ser breve".
"Realmente me dolió mucho, me escandalicé", dijo el pontífice a la corresponsal de Televisa en el Vaticano sobre el momento en que se enteró de los abusos cometidos por el sacerdote Marcial Maciel (1920-2008), fundador de la congregación de los Legionarios de Cristo.
Francisco se preguntó "cómo esta persona pudo llegar hasta esto", y consideró que Maciel "evidentemente era una persona muy enferma, porque además de todos los abusos, creo que también había dos o tres mujeres de por medio, hijos con una o con otra".
"O sea que había algo allí, y mucha plata. La corrupción empieza por los bolsillos, pero creo que se trataba de un enfermo, un gran enfermo", insistió.
Refirió que cuando se tomó conciencia en el Vaticano de las acciones de Maciel el entonces cardenal Joseph Ratzinger "llevó la cosa (la investigación) adelante y el papa san Juan Pablo II le dio luz verde de llevarla, y cuando lo hicieron papa ya actuó".
"Quiero dejar muy en claro que el entonces cardenal Ratzinger y san Juan Pablo II eran conscientes y dijeron adelante, uno en la investigación y el otro dando luz verde", dijo el papa argentino.
La congregación de los Legionarios de Cristo fue fundada en México en 1941 por Maciel, condenado posteriormente por el papa Benedicto XVI (Ratzinger) por sus "gravísimos e inmorales" comportamientos y por la vida que llevó "sin escrúpulos y sin verdadero sentimiento religioso".
Desde antes de la muerte del papa Juan Pablo II en 2005, el cardenal Ratzinger, entonces prefecto de la Congregación de la Doctrina de la Fe, ya seguía los pasos de Maciel, pero no fue hasta 2006 cuando, ya como papa, le castigó por los abusos sexuales que cometió durante décadas a seminaristas.
Sobre si hubo un encubrimiento en las altas esferas de la Iglesia a las acciones de Maciel, Francisco dijo en la entrevista, cuya segunda parte fue difundida la noche del viernes, que "uno puede presumir que sí, aunque siempre en justicia hay que presumir la inocencia".
"Pero sería raro que no tuviera algún padrinito por ahí, medio engañado, medio que sospechara y no supiera. Eso yo no lo he investigado", abundó.
Sobre los sacerdotes que abusan sexualmente de niños, el líder católico expresó: "Son antropófagos; es como si se comieran a los chicos, los destruyen. Aunque haya un solo cura (que abuse de menores) es suficiente para avergonzarnos y para hacer lo que hay que hacer. En esto hay que seguir adelante y no volver un paso atrás".
Por otro lado, el pontífice dijo tener "la sensación" de que su pontificado será breve, de "cuatro o cinco años".
"Es como una sensación un poco vaga; capaz que no. Es como la psicología del que juega y cree que va a perder para no desilusionarse y si gana estar contento. Pero tengo la sensación de que el Señor me pone para una cosa breve nomás", dijo.
Asimismo, encomió el camino seguido por su predecesor Benedicto XVI, quien en 2013 se retiró y asumió el título de papa emérito.
"Creo que lo que hizo Benedicto con mucha valentía fue abrir la puerta de los papas eméritos. Benedicto no hay que considerarlo como una excepción sino como una institución. Por ahí sea el único en mucho tiempo, por ahí no sea el único. Pero es una puerta abierta institucional", dijo.
Con todo, Francisco se mostró reacio a la idea de establecer una edad en la que los jefes de la Iglesia Católica deban retirarse. "No me gusta mucho eso de ponerle edad, porque creo que el papado tiene algo de última instancia; es una gracia especial", expuso.
"Yo no soy de una idea de poner una edad, pero sí soy de la idea de lo que hizo Benedicto", puntualizó.