El Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI) de México ordenó a la Secretaría de la Defensa (Sedena) reportar sobre las acciones llevadas a cabo en días previos y posteriores a la desaparición de los 43 estudiantes en Iguala, el 26 de septiembre de 2014.
"El IFAI revocó la declaratoria de inexistencia que hizo la Sedena de documentos firmados por mandos de la 35 Zona Militar y el 27 Batallón de Infantería, con asiento en Iguala, Guerrero, que reporten acciones llevadas a cabo en días previos y posteriores" al suceso, indicó el órgano de transparencia en un comunicado.
Asimismo, instruyó a la cartera a "reencauzar la solicitud de un particular para darle acceso a por lo menos a dos partes de novedades identificados", detalló.
El pleno del instituto analizó un recurso en el que un particular recurrió la respuesta a su solicitud de "copias de todas la bitácoras firmadas por los mandos encargados de la 35 Zona Militar y 27 Batallón de Infantería" entre los días 22 y 29 de septiembre de 2014".
Según la versión oficial, la noche del 26 septiembre los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa desaparecieron a manos de autoridades corruptas y miembros del cártel de Guerreros Unidos, quienes los asesinaron e incineraron sus restos en un basurero en el municipio vecino de Cocula.
Los padres de los desaparecidos no creen en esa versión y exigen la apertura de una línea de investigación sobre el papel que jugaron los militares esa noche, así como el acceso a los cuarteles de la región para buscar a los jóvenes, algo que aún no se ha producido.
En su respuesta inicial al particular, la Sedena aseguró que el 27 Batallón de Infantería "realiza funciones administrativas, técnicas, educativas, disciplinarias y de control de las operaciones, pero que ninguna elabora bitácoras".
El particular se mostró inconforme y la Sedena, en etapa de alegatos, confirmó la inexistencia y argumentó que "no hay lineamientos ni reglamentos que dispongan que los mandos deban elaborar bitácora alguna".
El comisionado Óscar Guerra destacó que la Sedena fundó su declaratoria de inexistencia en el hecho de que ni el Batallón ni la 35 Zona Militar elaboran documentos denominados bitácoras.
"El sujeto obligado basó la declaración de inexistencia en la palabra bitácora empleada por el solicitante", determinó el pleno.
"Su respuesta, lejos de tender a proporcionar la información aunque el solicitante no denomine correctamente los documentos, optó por declararla inexistente y no se esforzó por identificarla plenamente", agregó.
Tras revisar la normatividad que rige la Sedena y boletines de prensa relativos al suceso por parte de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) y las Cámaras legislativas, concluyó que el sujeto obligado podría tener documentos firmados por mandos de ambas dependencias.
En virtud de que el IFAI constata que el sujeto obligado "cuenta con al menos dos partes de novedades que constituyen documentos idóneos para satisfacer la parte de la solicitud", decidió revocar la respuesta de inexistencia de la documentación e instruir la Sedena.
"En caso de no contar con documentos respecto las demás fechas de interés del particular, deberá informarle por qué no cuenta con ellos, exponiendo los fundamentos a que haya lugar", resolvió.
EFE