La población en España descendió en 2015 por cuarto año consecutivo (99.439 personas menos) y se sitúa en 46,5 millones de personas, debido a la menor presencia de extranjeros, cuyo número se redujo un 2,7 por ciento en el año.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) difundidos hoy, a lo largo del pasado año 128.372 extranjeros abandonaron España, mientras que el número de españoles experimentó un aumento de 28.933 personas.
Los principales descensos los protagonizaron los ciudadanos de Rumanía (37.132), Reino Unido (29.315) y Ecuador (18.327).
De los europeos comunitarios inscritos en España, los más numerosos son los rumanos (715.136) y los británicos (253.928)
Entre los no europeos destacan los marroquíes (753.425) y, en América Latina, por país de nacionalidad, los ecuatorianos (158.070), colombianos (140.166) y brasileños (71.585).
Desde que en 1998 se comenzaron a publicar cifras oficiales, la población empadronada en España aumentó todos los años hasta 2012, cuando empezó a disminuir.
Esa tendencia continuó durante el pasado año aunque en menor intensidad que la producida en 2014, cuando abandonaron el país 293.843 extranjeros.
El 1 de enero de este año había inscritas en el llamado Padrón Continuo - que aglutina todos los padrones de los municipios españoles - 46.524.943 habitantes, de los que 41.923.671 tienen nacionalidad española y 4.601.272 extranjera (el 9,9 % de los inscritos).
En el caso de los extranjeros, los pertenecientes a los veintiocho países de la Unión Europea (UE) se redujeron en 111.526 en un año, hasta los 1,83 millones, mientras que los no comunitarios lo hicieron en 16.846 personas, hasta los 2,76 millones de personas.
La estadística refleja que en España el número de hombres y mujeres está bastante igualado con 22,82 millones en el primer caso y 23,69 en el segundo, y que el 86,9 % de la población ha nacido en España. EFE
