(EFE).- Los pronósticos de los meteorólogos de Venezuela coinciden en que condiciones meteorológicas en Brasil y Colombia permitirán la llegada de lluvias a mediados de abril, las que aminorarán la drástica sequía que afecta al país hace tres años.
“A mediados de mes se espera la llegada de las primeras precipitaciones producto del avance de la franja de nubosidad asociada a la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT) desde Colombia y Brasil (…), las cuales anuncian el inicio de la temporada de lluvia al sur de Venezuela”, dijo hoy el Inameh.
El reporte publicado por el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh)en su página web advierte que esas lluvias se limitarán a algunas zonas de los estados fronterizos Amazonas Bolívar, Apure y Táchira.
Es decir, alertó que “durante el mes de abril se espera que continúe predominando sobre gran parte del territorio nacional un relativo buen tiempo asociado a cielo poco nublado sin precipitaciones”.
Recordó que estadísticamente en abril se registran las más altas temperaturas en Venezuela y prevé que en el cuarto mes de este año haya días muy calurosos, “producto de la alta radiación e insolación especialmente en las regiones oriental, central, centro-occidental”.
Las lluvias con nubes procedentes del Mar Caribe que disipen la sequía en el norte costero, zona donde se levanta Caracas, solo serán posibles, detalló el reporte meteorológico, con “penetraciones ocasionales” de algunos “restos de frentes fríos acompañados de vaguadas”.
Al respecto, el presidente del Inameh, José Sottolano, indicó hoy en un comunicado que “es muy común que tengamos condiciones norte; es decir, restos de frentes fríos de América del Norte”.
Estos “restos”, destacó, “resultan beneficiosos para Venezuela por cuanto ofrecen chaparrones en temporada seca que aumentan la humedad de la capa boscosa y refrescan el ambiente”.
“Estamos esperando el paso de otros eventos similares que pudieran cambiar las condiciones climatológicas (de sequedad) y ayudar a paliar la situación crítica de déficit de lluvias experimentados en los últimos tres años”, añadió Sottolano.
El Inameh ha evaluado que el fenómeno climatológico El Niño, que en Venezuela ha acentuado una sequía que comenzó en 2013, “se encuentra en proceso de disminución y se espera que a partir de abril su descenso sea mucho más rápido”.
La generación hidroeléctrica aporta el 60 por ciento de la electricidad de Venezuela, cuyos casi 30 millones de habitantes registran un consumo promedio de 15.500 megavatios por hora.
El viceministro de Energía Eléctrica, Freddy Brito, dijo el martes pasado que un 40 por ciento del consumo nacional es residencial, principalmente con el uso de aparatos de aire acondicionado que debido al calor son prácticamente obligatorios.
Del 60 por ciento restante, Brito detalló que un 24 por ciento corresponde al consumo comercial e industrial; un 21 por ciento al consumo eléctrico de las llamadas empresas básicas, productoras de aluminio, principalmente; y un 15 por ciento final que no detalló.
Aunque el Gobierno ha negado racionamientos de electricidad o agua, y sostiene que los constantes cortes de los servicios se deben a “fallos puntuales”, ha previsto que los racionamientos se oficializarán si la sequía persiste.
Según el Inameh, el embalse de la Hidroeléctrica del Guri (centro sur), que aporta cerca de la mitad de la electricidad que consumen los hogares en Venezuela, está en la actualidad a solo cuatro 4 metros por encima de su cota crítica, al registrar en los últimos días una altura de solo 244 metros sobre el nivel del mar. EFE