El Secretario General de la ONU aseguró este martes que el llamamiento humanitario de la Cumbre de Estambul ha sido escuchado y pidió que se aproveche ese impulso para aliviar el sufrimiento de millones de personas.
En la clausura de la Cumbre Humanitaria Mundial, Ban Ki-moon recordó que el mundo tiene los recursos y conocimientos necesarios para atender a todos sus habitantes.
Lo que hace falta, dijo, es una acción coordinada y solidaria.
"No hay un país ni un organismo internacional en el mundo, independientemente de su poder o de los recursos que tenga, que pueda hacerlo solo. Todas las manos deben trabajar juntas. Necesitamos que todos los gobiernos, agencias, comunidades y sociedad civil muestren su compasión y liderazgo".
Ban expresó, por otra parte, su decepción por la ausencia de algunos líderes mundiales en el evento, sobre todo los de los países del G7, con excepción de la canciller alemana Angela Merkel.
El titular de la ONU señaló que si bien esos países figuran entre los donantes más generosos, hace falta un mayor compromiso por su parte, en particular para la búsqueda de soluciones políticas.
Lamentó también que las divisiones entre los miembros permanentes del Consejo de Seguridad hayan "impedido el progreso en años recientes, no sólo en asuntos críticos para la guerra y la paz, sino también en cuestiones humanitarias".