En la etapa final para que el proceso de paz en Colombia se alcance, este lunes 30 de mayo inicia un paro nacional agrario, casi por las mismas razones que lo provocaron hace tres años, justo cuando iniciaban los diálogos entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP).
En aquella ocasión, pese al Acuerdo Agrario firmado el 26 de mayo entre el Gobierno y la FARC-EP, varios sectores productivos en regiones claves para el desarrollo de ese pacto se unieron al paro. En esta ocasión, la convocatoria es de la Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y Popular, integrada por la mayoría de organizaciones populares con arraigo en zonas campesinas, indígenas o de comunidades afrodescendientes.
La Minga Nacional Agraria, Campesina, Étnica y Popular, como denominan las movilizaciones pacíficas en el país, busca resaltar las dificultades por las que sigue atravesando el sector agrario, por lo que más que de nuevos reclamos, se habla es de incumplimiento de promesas.
Cuenta con el apoyo de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), de la Marcha Patriótica, de movimientos campesinos, estudiantiles, sindicales y populares, así como de transportadores y organizaciones agrícolas.
El Gobierno de Juan Manuel Santos, por su parte, señala que no ha incumplido los acuerdos de 2013. En cambio, ha destinado cuantiosos recursos para satisfacer las demandas y que el propio Santos, los ministros y otros altos funcionarios han sostenido múltiples reuniones con voceros de los movimientos agrarios con una clara disposición al diálogo. TELESUR