La Fiscalía dictó medida de aseguramiento y ordenó la captura del agregado naval y aéreo en Francia, el coronel Sergio Andrés Garzón Vélez, así como otro oficial de la Fuerza Aérea, por la masacre de Santo Domingo en Arauca en 1998.
Un fiscal de la Unidad de Derechos Humanos profirió resolución de acusación y dictó medida de aseguramiento en contra del coronel de la Fuerza Aérea y actual agregado militar en Francia, Sergio Andrés Garzón Vélez, y el teniente Germán David Lamilla, por la masacre de 17 personas en Santo Domingo en Arauca ocurrida en diciembre de 1998.
En su momento cuando un juez de la República condenó a otros dos oficiales de la Fuerza Aérea, también ordenó investigar la presunta complicidad del teniente por su participación en el operativo, y la del ahora coronel, por estar al mando de la tropa y por su presunta responsabilidad en la adulteración del video que llegó a la Procuraduría.
Recientemente, la semana pasada, en un fallo de segunda instancia, el Tribunal Superior de Bogotá ratificó la condena de 30 años de cárcel contra los dos oficiales de la Fuerza Aérea que encabezaron el bombardeo al municipio araucano. Ellos son el capitán César Romero Pradilla y el teniente Johan Jiménez, piloto y copiloto respectivamente del helicóptero de la FAC que atacó esa localidad cuando los militares iban en busca de guerrilleros del ELN.
En la sentencia proferida por el Tribunal Superior de Bogotá, los integrantes de la FAC también fueron sentenciados por el delito de lesiones dolosas de otras 21 personas, entre ellas varias mujeres y menores de edad.
Tras los hechos, el entonces comandante de la FAC, coronel Héctor Fabio Velasco, aseguró que la causante de los destrozos y las pérdidas humanas fue una bomba detonada por las Farc; sin embargo desde un comienzo dicha versión generó dudas, debido a que algunos testigos aseguraron que la explosión fue causada por ataques desde un helicóptero, tal como lo corroboraron expertos del FBI, quienes determinaron que sobre la población cayó una bomba tipo cluster o racimo. En la misma decisión fue absuelto el técnico Héctor Mario Hernández, al considerarse que era un subordinado de los oficiales condenados por estos hechos.
Radio Caracol