Gaddafi ratifica que no se rendirán ante asesinatos en masas de la OTAN
El líder de Libia, Muammar Al Gaddafi, dijo este miércoles, mediante un mensaje difundido por la televisión pública de ese país, que no se rendirá ante los asesinatos en masas que comete a diario en la nación norafricana la Organización del Atlántico Norte (Otan), la cual en tres meses han causado casi mil muertos.
En un homenaje a su compañero, Juildi Hemidi, quien perdió a varios miembros de su familia el pasado lunes tras un bombardeo perpetrado por la Otan contra su vivienda, Al Gaddafi reiteró que continuarán en resistencia, reseñó el portal web de La Radio del Sur.
"Nosotros resistiremos y la batalla continuará hasta el más allá, hasta que se acabe con ustedes, pero nosotros no seremos acabados", dijo Al Gaddafi
"No es más posible ningún acuerdo entre nosotros después de que ustedes han matado a nuestros hijos y nietos. Nosotros estamos con la espalda contra el muro. Ustedes (los occidentales) pueden retroceder", añadió.
Al Gaddafi comentó que el pueblo libio no tiene miedo, al tiempo que denunció que se ha lanzado una cruzada contra un país musulmán, que apunta a civiles y niños.
Entretanto, miles de libios asistieron al funeral de al menos nueve civiles asesinados en los últimos ataques perpetrados por la organización imperial.
Este miércoles, en la ciudad de Surman (oeste de Trípoli), fueron enterrados a algunos de los muertos, entre ellos dos niños, a causa de un bombardeos.
El Gobierno de Libia denunció el ataque a blancos civiles, luego de que este lunes la alianza imperialista reconociera la muerte de 15 civiles por "error".
Frente a estas muertes, el Gobierno de Italia pidió a la Otan un cese de hostilidades por razones humanitarias.
En ese sentido, el ministro de relaciones exteriores de Italia, Franco Frattini, aseguró que aparte del alto al fuego “es fundamental una suspensión humanitaria de las acciones armadas para que funcionen inmediatamente corredores humanitarios".
Sin embargo, la Otan amplió sus bombardeos sobre Libia y atacó dos puestos de control civiles en las localidades de Khoms y Nalut, al occidente del país árabe.