Hay diferentes tipos de Escherichia coli, pero en este caso se registra la variante enterohemorrágica que se manifiesta después de la ingesta de algún alimento contaminado. El período de incubación de la bacteria toma entre tres o cuatro días para después presentarse cuadros de diarrea con rastros de sangre hasta volverse sanguinolenta por completo.
Si no se trata la enfermedad, esta puede evolucionar hasta ocasionar una falla renal denominada Síndrome Urémico Hemolítico, que obliga a que el paciente requiera una hemodiálisis para salvarle la vida. Del total de infectados, a nivel mundial, 600 desarrollaron esta complicación considerando que la Escherichia coli afecta el aparato digestivo en el tracto final, sobre todo en el colón.
La infección se transmite por la vía fecal-oral, cuando las heces del enfermo llegan a contaminar el agua con el que se lavan los alimentos. Además, indicó que aún no se identifica qué alimentó transportó a la bacteria aunque se sospecha de ciertas semillas que aquí llamamos frijolitos chinos.