(Reuters) - La estatización del conglomerado venezolano de alimentos y bebidas Empresas Polar sería un “disparate”, ya que cumple con todas las leyes vigentes, afirmó el jueves a Reuters el presidente de la compañía, Lorenzo Mendoza.
El importante productor de alimentos básicos, bebidas y cerveza ha recibido amenazas del propio presidente izquierdista Hugo Chávez, quien lo acusa de acaparar alimentos y especular con los precios, abusando de su fuerte presencia en el sector.
“Eso es un disparate, una locura, esta es una empresa privada, tenemos nuestra propia realidad jurídica que nos la ampara la Constitución, dedicada a nuestra actividad que desempeñamos, cumpliendo las leyes venezolanas”, apuntó Mendoza tras participar en un evento empresarial en Santiago.
Mendoza usualmente evita involucrarse en el encendido debate político que se ha profundizado en el país caribeño durante el mandato de Chávez, que ha nacionalizado importantes sectores estratégicos.
El líder del grupo industrial, que tiene también operaciones en Colombia y Estados Unidos, dijo que no tiene planes de expandirse a otros rubros fuera de alimentos y bebidas, y que mantendrán su presencia en Venezuela.
Sin embargo, el ejecutivo dijo que debe sincerarse un estricto control de precios de alimentos que rige en Venezuela desde el 2002.
“En Venezuela tiene que haber una ‘sinceración’ de los costos asociados, porque tenemos una congelación de precios en muchos rubros (…) y claro, cuando te suben los precios de las materias primas y no se reconoce esa realidad, es que termina habiendo un problema importante”, afirmó.
Muchos empresarios locales han dicho que el control de precios ha sido responsable de olas intermitentes de desabastecimiento.
“Termina sufriendo el consumidor que no consigue los productos porque no hay forma de abastecerlos, nadie puede producir a pérdida”, acotó.
Por Moisés Avila