Un grupo de científicos dice haber logrado desarrollar una nueva superficie plástica que supera las dificultades asociadas con el cultivo de células madre adultas.
Las superficies estándar no son aptas para cultivar grandes cantidades de células madre y retener sus características útiles.
Se espera que este descubrimiento lleve a la creación de terapias con células madre para la regeneración de hueso y tejido, y también para tratar enfermedades como la artritis.
El estudio fue realizado por las universidades de Glasgow y Southampton, en el Reino Unido.
La nueva superficie, con "nanopatrones", fue creada usando procesos de manufactura similares a los usados para producir discos Blu-ray.
La superficie está cubierta con fosas diminutas, lo cual, según los investigadores, la hace más efectiva para permitir el crecimiento de las células madre y su conversión a células útiles para terapias.
"Fábrica de células"
Actualmente, cuando se obtienen células madre de un paciente, éstas son cultivadas en un laboratorio para incrementar las cantidades de células y crear un grupo de volumen suficiente como para detonar el proceso de regeneración celular.
En ese punto, las células pueden ser reintroducidas al paciente.
El proceso de cultivo se vuelve complicado porque el crecimiento de las células madre sobre plástico estándar no siempre se expande para crear nuevas células madre, sino más bien para crear otras células que no sirven para terapias.
Quienes dirigieron el proyecto de las nuevas superficies fueron Matthew Dalby, de la Universidad de Glasgow, y Nikolaj Gadegaard y Richard Oreffo, de la Universidad de Southampton.
"Nuestra tecnología podría ser el primer paso para desarrollar el cultivo de células madre de gran escala, lo cual permitiría la creación de una amplia gama de terapias para muchas enfermedades comunes como diabetes, artritis, Alzheimer y Parkinson", señaló Dalby, quien piensa que la superificie podría estar disponible comercialmente.
El estudio fue financiado por el Biotechnology and Biological Sciences Research Council (BBSRC) y la Universidad de Glasgow.
El documento que da cuenta del descubrimiento fue publicado en la revista científica Nature Materials.
BBC