Para el padre Adolfo Rojas, sacerdote de la Arquidiócesis de Barquisimeto, en el estado Lara, la conducta de los jerarcas de la iglesia católica en la época de la independencia siempre estuvo en contra de la libertad de los habitantes de Venezuela, porque formaba parte de una oligarquía minoritaria que hoy sigue defendiendo.
“Es decir, representantes del clero en expresión de la iglesia que tomó parte totalmente en contra del grito de la libertad”, dijo en contacto telefónico a Dando y Dando, que transmite VTV, al analizar la ausencia de los obispos en las celebraciones del Bicentenario de aquella gesta independentista.
“Yo personalmente creo que para esa época era una sociedad de castas, de la que formaba parte integral y también era la fiel amante y fiel servidora del rey español. De tal manera que desconoció incluso en la conquista y colonización que los indígenas tenían alma…”
“No es de extrañar que el 19 de abril y 5 de julio, obviamente..l.a iglesia estaba ausente porque el rey Fernando era a quien le servía", agregó.
Comentó el padre Rojas que los obispos de la actual Conferencia Episcopal Venezolana todavía “siguen encerrados” en sí mismos, y no acatan la solicitud del ya fallecido Papa Juan Pablo II, cuando en la entrada del tercer milenio pidió buscar una nueva evangelización, una nueva conducta ética.
Pero a juicio del Padre Rojas, este exhorto quedó en el vacío.
“Así como la jerarquía, hoy, defiende los intereses de la oligarquía, y es parte de ella, desgraciadamente es como un continuo teológico, una nueva concepción de tener prisionero al ser humano”, en referencia a la histórica forma de pensarmiento y comportamiento que la iglesia mantiene desde hace 200 años.
