El presidente estadounidense Barack Obama exhortó este sábado a los miembros del Congreso a poner fin a lo que denominó un "bloqueo" político en Washington, aprobando la legislación que apunta a la creación de más empleos.
"No podemos continuar con el forcejeo partidario en nuestro camino, esa idea de que trabajar para la próxima elección es más importante que trabajar en las cosas correctas", advirtió el mandatario en su discurso semanal por radio e internet.
"Eso es lo que nos detiene, el hecho de que algunos en el Congreso quieren ver perder a sus oponentes en lugar de ver ganar a Estados Unidos", añadió.
Estos comentarios se producen en momentos en que Obama es atacado por sus adversarios del Partido Republicano y por algunos miembros de su propia base demócrata por la gestión de la crisis económica, especialmente el desempleo, que permanece en un 9,1% y con una recuperación estancada.
La semana próxima, Obama intentará reconectarse con los votantes estadounidenses durante una gira en autobus que lo llevará a Minesota, Iowa e Illinois, en momentos en que los norteamericanos están sumidos en el miedo de retornar a una recesión.
Obama admitió que el país enfrenta "algunos desafíos económicos muy resistentes", pero puso en hombros del Congreso la culpa de la lenta recuperación de la crisis.
"Ultimamente, la respuesta desde Washington ha sido el partidismo y el bloqueo que solamente hacen disminuir la confianza pública y dificultan nuestros esfuerzos para el crecimiento de la economía", dijo.
El presidente urgió a los legisladores a aprobar un recorte en el presupuesto, a dinamizar los procesos para obtener nuevas patentes para la innovación y a ratificar los acuerdos de libre comercio, que según él ayudarán a vender más productos estadounidenses en todo el mundo.
No hay "excusas para la inacción", precisó.
"Después de todo, Estados Unidos votó por un gobierno dividido, no por un gobierno disfuncional, y tenemos trabajo por hacer", concluyó Obama.
AFP